martes, 12 de julio de 2011

17 de julio del 2011: 16o Domingo del tiempo ordinario

LECTURAS

PRIMERA LECTURA
LECTURA DEL LIBRO DE LA SABIDURÍA 12, 13. 16-19

Fuera de ti, no hay otro dios al cuidado de todo, ante quien tengas que justificar tu sentencia. Tu poder es el principio de la justicia, y tu soberanía universal te hace perdonar a todos. Tú demuestras tu fuerza a los que dudan de tu poder total, y reprimes la audacia de los que no lo conocen. Tú, poderoso soberano, juzgas con moderación y nos gobiernas con gran indulgencia, porque puedes hacer cuanto quieres. Obrando así, enseñaste a tu pueblo que el justo debe ser humano, y diste a tus hijos la dulce esperanza de que, en el pecado, das lugar al arrepentimiento.

Palabra de Dios.


SALMO RESPONSORIAL
SALMO 85

R.- TÚ, SEÑOR, ERES BUENO Y CLEMENTE.

Tú, Señor, eres bueno y clemente,
rico en misericordia con los que te invocan.
Señor, escucha mi oración,
atiende a la voz de mi súplica. R.-

Todos los pueblos vendrán
a postrarse en tu presencia, Señor;
bendecirán tu nombre:
"Grande eres tú, y haces maravillas,
tú eres el único Dios”. R.-

Pero tú, Señor, Dios clemente y misericordioso,
lento a la cólera, rico en piedad y leal,
mírame, ten compasión de mí. R.-


 SEGUNDA LECTURA
LECTURA DE LA CARTA DEL APÓSTOL SAN PABLO A LOS ROMANOS 8, 26-27

Hermanos:
El Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad, porque nosotros no sabemos pedir lo que nos conviene, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos inefables. Y el que escudriña los corazones sabe cuál es el deseo del Espíritu, y que su intercesión por los santos es según Dios.

Palabra de Dios.


LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 13, 24-43






***************
A guisa de introducción:

“De igual modo, Dios no se lo permite… ”

En un mundo donde el bien y el mal se mezclan íntimamente, donde conviven juntos, es normal que los cristianos se pregunten (se cuestionen) por la actitud de Dios: POR QUE ES ÉL TOLERANTE? POR QUE NO INTERVIENE? QUE ES LO QUE ÉL ESPERA?

Por fortuna sabemos que nuestro Dios es infinitamente justo; que esperamos de Él una confirmación de nuestras evaluaciones (o puntos de vista) sobre la gente y su situación actual. Uno no es optimista o espera que Dios sea benévolo con ciertas personas (que consideramos “malas”) el día del juicio particular y o final…

El texto del libro de la Sabiduría (primera lectura) y la parábola de la Cizaña  (lectura breve del evangelio) proponen una respuesta a estas cuestiones. En su momento oportuno, juzgara el bien y el mal; por el instante si Él no se permite intervenir, es para permitirle al BIEN de manifestarse y desarrollarse (florecer). No es porque Él se muestre desinteresado por nosotros o porque Él apruebe el mal. Al contrario de una actitud fatalista, nosotros descubrimos en estas parábolas del señor una doble invitación:

Primero confiar en Dios con respecto a la buena marcha de la aventura humana y enseguida como El, tomar partido por el bien y hacer factible (posibilitar) el crecimiento de las fuerzas positivas.

El crecimiento del Reino de Dios es desconcertante: el germina en medio del mal. El comienza discretamente sin mucho ruido y luego echa raíces en el mundo. Lo que es cierto es que Dios vigila , sigue de cerca este crecimiento…

Aproximación psicológica  y política del evangelio
ACTIVAR EL PROCESO.

Una bellota (fruto de la encina o del roble) que cae en el suelo es una experiencia insignificante (anodina). Pero han contemplado ustedes la majestad de un roble o una encina (el árbol) cincuentenario (a)?

Con el Reino de Dios pasa lo mismo, dice Jesús. También misteriosamente pero con la misma certeza. Nadie esta forzado (u obligado) a tener fe. Mas si ya se ha visto un roble (o una encina), es necesario creer en la bellota. Y si se cree en la bellota, se ha de creer en el misterio del crecimiento.

Y si el tiempo de los hombres transforma una semilla (o grano) insignificante en un gigante imponente, el tiempo de Dios no transformara algunos gestos de ternura y de compartir en un Reino de comunión y de paz?

…Es mi convicción, dice Jesús. Por qué? Porque yo se que el Padre es bueno. Cómo?  Al igual que el crecimiento misterioso de los árboles y la fermentación misteriosa de la masa.

Yo creo en un mundo que Dios lleva a su plenitud y desarrollo, dice Jesús. A pesar de los accidentes de esta marcha que me aparecen y quedan también tanto para ustedes como para mi inexplicables.

Y cuando Pedro escribe que por la santidad de su vida, los hombres no hacen más que  “acelerar la venida” del Reino de Dios (2 Pe 3,11-12), él está de acuerdo una convicción del mismo Jesús. Para activar el proceso del crecimiento, el viñador decide hacer mantenimiento (desyerbar, cuidar) alrededor de la higuera que tarda en dar fruto, y poner abono (Mt 13,8). De su lado, Juan Bautista, llega para comprometerse y preparar el terreno (Mt 3,3).

En cuanto a Jesús, Él va hasta el final  para que sus discípulos puedan continuar avanzando en su toma de conciencia: “es por (para) su provecho  (es necesario) que yo me vaya; en efecto si yo no me voy, el Espíritu no vendrá…”  (Jn 16,7).

Por su fidelidad, Jesús le  permite entonces al Espíritu progresar. 

Los discípulos también pueden hacer lo que les toca (su parte). Por su manera de vivir, ellos pueden transmitir a otros el IMPACTO de Jesús: “si ustedes se aman los unos a los otros, todos reconocerán que ustedes son mis discípulos” (Jn 13,35).

Resumiendo, Jesús esta convencido que Dios encamina y o lleva el mundo a su pleno desarrollo. Para Él , a pesar de las apariencias discretas, este proceso ha comenzado y es irreversible. Y por nuestro propio compromiso en y con el amor , por nuestra búsqueda activa de la justicia, Él esta convencido que nosotros estamos llamados a activar el proceso.

REFLEXION

Hoy, como en tiempos de Jesús y durante toda la historia de la humanidad, solemos dividir y “organizar” aparentemente la sociedad con criterios que consideramos muchas veces correctos: buenos y malos deben estar separados y puestos en extremos opuestos.

Esta práctica de dividir entre buenos y malos, era frecuentemente aceptada por muchos grupos en el tiempo de Jesús por diversos criterios religiosos (fariseos y esenios) igualmente que por los grupos económicos y políticos (herodianos, saduceos y celotes), pues todos ellos veían como opositores a quienes no pensaban, creían u opinaban según sus mismos criterios.

Cristo tiene una visión realista de nuestro mundo. El no es ni un optimista ciego que no ve el mal, ni un pesimista radical que no encuentre nada bueno alrededor de nosotros. Nuestra humanidad es una mezcla de bien y de mal, de “gracia y de pecado”. En nuestro propio corazón, los dos existen juntas uno al lado del otro.

La perfeccion no es de este mundo, ella no existe. 

Es verdad por la naturaleza en general: los huracanes, las tempestades tropicales, los tsunamis, los terremotos, los incendios forestales, las inundaciones, las sequias, nos afligen regularmente. 

Es verdad para las cosechas: las malezas, la cizaña, la “escoba dura” crecen junto al café, el trigo, las legumbres, las frutas y las flores. 

Es también verdad para cada uno de nosotros, San Pablo decía: “Querer el bien está a mi mano, pero no lo hago: porque yo no hago el bien que quiero y hago el mal que no quiero” (Rom 7,19).

En la vida cotidiana, las personas se enamoran y se imaginan  el futuro con muchas esperanzas y proyectos maravillosos. Después llegan las peleas de la mudanza y el acomodamiento, los problemas de dinero, las enfermedades, las infidelidades, las separaciones, los divorcios, los hijos que son intercambiados entre la madre y el padre y que sufren por ello agresiones y vergüenzas. 

Estas son realidades cotidianas.

El mensaje de la paciencia de Dios es el mismo que Cristo proclamo toda su vida, Él que fue hacia aquellos que estaban heridos, destruidos, desorientados: las prostitutas, las personas deshonestas, los escribas, los sacerdotes, los políticos, los cobradores de impuestos. 

Para Cristo no hay nada fijo de avance (definitivo) y todo puede cambiar. Él no se desespera jamás tratando de transformar la cizaña de nuestro corazón en buena semilla! Tenemos miles de ejemplos de este fenómeno en el Nuevo Testamento y en las crónicas del  cristianismo: Zaqueo, Maria Magdalena, la Samaritana, Pedro, Pablo, Agustín, Francisco de Asís, Ignacio de Loyola…La historia está llena de pecadores que han llegado a ser santos.

Nosotros , todos con seguridad que conocemos personas que, con la ayuda de un pariente, de un amigo o un vecino , y con la Gracia de Dios, han logrado cambiar la orientación de sus vidas.

El Reino de Dios posee una fuerza extraordinaria que puede transformar profunda y o plenamente. El Señor no condena los pecadores, no los juzga sino que los acoge y come con ellos: “Dios no ha enviado su Hijo al mundo para juzgar al mundo, sino para que el mundo sea salvado por él”  (Jn 3,17).

El evangelio de este domingo quiere liberarnos de nuestros prejuicios y nuestros sectarismos, de nuestros juicios tan severos y tan odiosos para con los otros. 

Dios nunca ha querido una Iglesia de “puros”, sino una asamblea de gente frágil que cae y se levanta, que se arrepienten y son perdonados. No es un asunto de cristianos y de Iglesia provocar inquisiciones, cazas de brujas  o hacer purgas para liberar el terreno o “limpiar el mundo”. Solo Dios conoce el fondo de los corazones. 

Como cristianos, no tenemos ninguna autoridad de pronunciar un juicio (o dictamen) final sobre alguien, porque nuestras sentencias son frecuentemente injustas y falseadas por nuestros perjuicios y nuestras “tomas de partido”. Nosotros nos dejamos influenciar fácilmente por los Medios de Comunicación  y las “MAYORIAS” : “Está escrito en los periódicos!”

En Alemania, antes de la segunda guerra mundial, el 85% de los periodistas estaban a favor de Hitler. Ellos tuvieron mucho que ver al influir en lo que siguió (en los sucesos que vinieron)  después y esto le costó la vida a 50 millones de personas. Hoy, la mayoría de los Medios de información (comunicación) están a favor de los comportamientos que van en contra de nuestros valores cristianos. Esto no puede darle validez y o legalidad a aquellas maneras de actuar y de hacer. No nos corresponde a nosotros juzgar, pero si nos toca actuar de acuerdo a nuestra conciencia cristiana.

Muy a menudo, creemos que es necesario ponernos del lado de la « MAYORIA », y seguir las encuestas.

En los Estados Unidos, en el tiempo de Lincoln, la gran mayoría de la gente estaba a favor de la esclavitud. Abolir tal barbarie social representaba un desastre económico! Hoy , millones de personas están contra la reglamentación sobre el medio ambiente (o la naturaleza): eso costaría demasiado caro a la industria!

Durante este tiempo, nosotros sufrimos los cambios rápidos de la temperatura y sufrimos las consecuencias que van con este fenómeno de degradación.

Cristo nos dice hoy: no caigan en la trampa por “lo que piensa todo el mundo, atención a los juicios o condenas prematuras, apresuradas”. Antes de juzgar, dejen entrar en sus razonamientos los criterios del evangelio.

Y antes de ser intolerantes con los otros, sean críticos con ustedes mismos. Es la parábola de la paja en el ojo del otro y la viga en el nuestro. Si tenemos ganas de juzgar, comencemos por juzgarnos nosotros mismos. Esto calmara nuestros deseos ardientes de justicia vindicativos y arrogantes. “no juzguen  para no ser juzgados; porque de acuerdo a su juicio se les juzgara, y de la manera como midan serán medidos”.

DE SERVICIOS KOINONIA (SERVICIO BIBLICO LATINOAMERICANO)

Jesús sabía que Dios está en todas partes y a todos acoge, y lo expresa simbólicamente, sembrando respeto por los demás y creando paciencia y esperanza frente a aquellos seres humanos que se han demorado en alcanzar niveles de humanidad suficientes en igualdad y justicia, por el egoísmo que empobrece y empequeñece nuestra humanidad. Jesús llama a la apertura de la mente y el corazón para acoger con esperanza (no pasivamente y con indiferencia) a quienes aparecen ante nuestra forma de vida como diferentes (que solemos catalogar como “malos”). 

Necesitamos tener apertura para acoger con pluralismo la diferencia, que siempre va a estar presente en nuestra humanidad.

No hay que ignorar en la parábola de la cizaña la presencia del mal en la historia, como lo reconoce Jesús en la presencia del enemigo que siembra la cizaña en el campo. Quiere llamarnos la atención de que no hay que buscar con afán, y posiblemente confundir la semilla buena con la semilla mala. Muchas veces dividir la humanidad entre buenos muy buenos, y malos muy malos, ofreciendo el premio de la salvación para los primeros y la condenación para los segundos, puede ocasionarnos equivocaciones irreparables. Sólo a Dios le corresponde juzgar, con inmensa justicia y misericordia, a cada ser humano, como sólo Dios lo sabe hacer.

Por creernos muchas veces con el poder y la autoridad, nos atribuimos en nuestra conciencia actitudes que excluyen y separan a unos de otros; nuestra autosuficiencia egoísta separa en la práctica cotidiana a personas que por su situación socio-económica o ideológica, son marginados y excluidos por una sociedad dividida en el poder, olvidando que todos y todas somos hermanos y hermanas que compartimos una misma humanidad.

El Reino debe implicar para el seguidor de Jesús una acción transformadora en la vida cotidiana, que llegue hasta lo más profundo del actuar de cada ser humano, y el llamado permanente a la búsqueda y construcción de un mundo más humano, no sólo para unos pocos, sino para todos. Las estructuras basadas en la injusticia no crean el bien necesario para que el mundo avance, sino que generan más muerte y división en la humanidad, atacando con su fuerza destructora cualquier propuesta alternativa de construcción de una nueva humanidad.

No podemos olvidar que la buena noticia que Jesús vino a anunciar (el Reino) es una Buena Nueva para los pobres, en la que de ahora en adelante Jesús y sus discípulos lucharán por una sociedad igualitaria. Comprender el valor de lo pequeño, de lo pobre, como opción fundamental de Jesús y de quienes proseguimos su causa, debe ser una denuncia permanente contra tantas formas de opresión y marginación de estructuras injustas que deshumanizan a tantas personas y comunidades, en donde vive ocultamente el valor de la grandeza del Reino cuando se construye organización y se promueven los valores del Reino.

Dicho esto, abordemos un segundo nivel más crítico en este comentario.

Esta parábola puede resultar alienante si se toma como una invitación a la inactividad, o a la suspensión de nuestra responsabilidad, para dejarla en las manos de Dios: él sería quien al final de la historia, más allá de la historia, debiera poner las cosas y las personas en su lugar... Esta idea de un Dios «premiador de buenos y castigador de malos», que contabiliza nuestras acciones y por cada una de ellas nos dará un premio o un castigo, ha sido una idea central de la cosmovisión cristiana clásica. El miedo a la condenación eterna, pieza central de la bóveda de la cosmovisión cristiana clásica medieval y barroca, está en la misma línea. ¿Qué decir de todo ello hoy?

Es obvio que conforme pasa el tiempo estas convicciones fundamentales del pensamiento cristiano van pasando a segundo plano, dejan de estar presentes, no se mentan, incluso se evitan positivamente... Diríamos que ésa es una manifestación más del famoso «eclipse de lo sagrado» que se da en nuestra sociedad moderna. Si nuestros abuelos y sus generaciones anteriores vivieron en una sociedad que transparentaba la eternidad, la vida del más allá, con sus evidentes y lógicos premios y castigos, hoy vivimos, por el contrario, en una sociedad –y con una epistemología- en la que nos es difícil imaginar y pensar la vida del más allá de la muerte, los premios y los castigos de Dios, la separación post mortem del trigo y de la cizaña.

No vamos a pretender aquí resolver el asunto, ni abordar el tema en profundidad. Sólo queremos llamar críticamente la atención sobre él haciendo algunas afirmaciones.

Sea la primera la de reconocer que ya no se puede seguir hablando del más allá con la ingenuidad y la rotundidad con la que durante siglos se ha hablado: el tema merece una revisión profunda, y en todo caso no permite las afirmaciones clásicas con su escandalosa simplicidad.

Buena parte de las descripciones de los premios y castigos eternos hoy aparecen como antropomorfismos insostenibles, respecto a los que no sólo merece la pena no dar más pábulo, sino que es importante también reconocerlos explícitamente como tales, liberando de ese modo la fe de la obligación de compartir esas creencias mitológicas.

Es necesario tomar conciencia de la urgencia de una revisión a fondo de la posición de la fe cristiana respecto al más allá. Habitualmente hemos dado por bueno y por supuesto el dato de la vida más allá de la muerte, como si fuera un artículo de fe obvio, indiscutible. Y en efecto, normalmente ha quedado enteramente fuera de las crisis renovadoras de la fe en las décadas pasadas. El Concilio Vaticano II y su renovación simplemente envió a la trastera el conjunto de imágenes medievales y barrocas que aún estaban en circulación, y propició una relectura de la escatología en la línea del personalismo y del existencialismo, que realmente supusieron una brisa de aire fresco. La teología de la liberación, por su parte, simplemente añadió una lectura histórico-escatológica de la realidad (caminamos hacia el Reino) y la perspectiva de la opción por los pobres (redescubiertos como los «jueces escatológicos universales», Mt 25, 31ss), pero dejó intactas las afirmaciones centrales, sin llegar siquiera a plantearse su cuestionamiento (el libro exponente máximo de la escatología de la teología de la liberación es «Hablemos de la otra vida», de Leonardo BOFF, Sal Terrae, Santander, 1978).

Hoy, el nuevo paradigma de «revisión del sentido y la identidad misma de la religión», exigen dejar de vivir de rentas, dejar de repetir incuestionadamente lo de siempre, y plantearse de nuevo las preguntas más radicales: ¿existe realmente la vida más allá de la muerte? ¿Nos ha sido realmente revelada? ¿Cuándo, dónde, cómo? ¿Forma parte del contenido mismo de la fe cristiana? ¿Se puede ser cristiano aceptando la inseguridad y la oscuridad que la ciencia actual confiesa respecto a este tema?

Ciertamente, no son preguntas para el hombre y la mujer de la calle que prefieran seguir viviendo en una edición renovada de la «fe del carbonero». No son tampoco preguntas a difundir imprudentemente, ni trofeos para exhibirse como abanderado de la crítica y el esnobismo. Pero son preguntas que los responsables han de plantearse alguna vez en la intimidad de su fe, para que sondeando la dificultad del misterio, tomen la determinación de ser muy respetuosos en su lenguaje y no seguir viviendo de las rentas de afirmaciones que hoy son de hecho tan increíbles como incuestionadas, tan insostenibles como irresponsables.

El tema sólo está iniciado. Invitamos al lector a tirar del hijo y seguir profundizando, tanto desde el estudio de la teología como en su oración y su fe.

acá otro comentario para una fe adulta:



referencias bibliográficas:

1. HETU, Jean Luc. Les options de Jesus.
2. http://cursillos.ca/  (reflexion del P. Allard)









sábado, 9 de julio de 2011

FACUNDO CABRAL: 1937-2011



“cantor que canta los pobres ni muerto se ha de callar
pues ande vaya a para el canto de ese cristiano,
no ha de faltar el paisano que lo haga resucitar” 
(Atahualpa Yupanqui)


Que espera Dios?
que el hombre vuelva a ser un niño
para recibirlo en su seno
perfecto, perfecto

No crezca mi niño, no crezca jamás
los grandes al mundo le hacen mucho mal
El hombre ambiciona cada día mas
y pierde el camino por querer volar

Vuele bajo porque abajo
esta la verdad
esto es algo que los hombres
no aprenden jamás

Por correr el hombre no puede pensar
que ni el mismo sabe para dónde va

Sigue siendo niño y en paz dormirás
sin guerras ni máquinas de calcular

Vuele bajo...

Dios quiera que el hombre pudiera volver
a ser niño un día para comprender
Que está equivocado si piensa encontrar
con una escopeta la felicidad
Vuele bajo...



En 1996, la Unesco declaró a Facundo Cabral "mensajero mundial de la paz".

El compositor y cantante argentino Facundo Cabral murió este sábado en Guatemala cuando se dirigía a abandonar ese país en el que se encontraba de gira luego de varias presentaciones.
El trovador de 76 años perdió la vida camino al aeropuerto La Aurora donde fue emboscado por hombres armados que dispararon contra el automóvil en el que viajaba.



LA CANCIÓN

Me gusta el mar y la mujer cuando llora
las golondrinas y las malas señoras
saltar balcones y abrir las ventanas
y las muchachas en abril

Me gusta el vino tanto como las flores
y los amantes, pero no los señores
me encanta ser amigo de los ladrones
y las canciones en francés

No soy de aquí, ni soy de allá
no tengo edad, ni porvenir
y ser feliz es mi color
de identidad

Me gusta estar tirado siempre en la arena
y en bicicleta perseguir a Manuela
y todo el tiempo para ver las estrellas
con la María en el trigal

No soy de aquí, ni soy de allá
no tengo edad, ni porvenir
y ser feliz es mi color
de identidad,

En sus conciertos, refiriéndose a su madre, Sara, recordaba la oración que ella rezaba:"Señor, te pido perdón por mis pecados, ante todo por haber peregrinado a tus muchos santuarios, olvidando que estás presente en todas partes. En segundo lugar, te pido perdón por haber implorado tantas veces tu ayuda, olvidando que mi bienestar te preocupa más a tí que a mí. Y por último te pido perdón por estar aquí pidiéndote que me perdones, cuando mi corazón sabe que mis pecados son perdonados antes que los cometa. ¡Tanta es tú misericordia amado Señor!".

"Cada mañana es una buena noticia, cada niño que nace es una buena noticia, cada hombre justo es una buena noticia, cada cantor es una buena noticia, porque cada cantor es un soldado menos".

"Ahora mismo le puedes decir basta al miedo que heredaste, porque la vida es aquí y ahora mismo".

"Fui analfabeto hasta los 14 años, por eso cuando me dicen 'no puedo', yo les digo 'no jodas'".
"Somos hijos del amor, por lo tanto nacemos para la felicidad (fuera de la felicidad son todos pretextos), y debemos ser felices ".

"Nunca pudo ser inteligente porque cada vez que intentaba aprender algo, llegaba la felicidad y la distraía", decía Cabral sobre su madre.

"Mira si será malo el trabajo, que deben pagarte para que lo hagas".

"Si los malos supieran lo buen negocio que es ser bueno, serían buenos, aunque sólo fuera por negocio".

"Lo maravilloso de la tercera edad que estoy atravesando es haber vivido intensamente la primera y la segunda. Y yo, por suerte, fui joven e irresponsable durante muchos años".

"Tienes un cerebro como Einstein, tienes un corazón como Jesús, tienes dos manos como la Madre Teresa, tienes una voluntad como Moisés, tienes un alma como Gandhi, tienes un espíritu como Buda. Entonces, ¡cómo puedes sentirte pobre y desdichado!"

Cuando un pueblo trabaja dios lo respeta. Pero cuando un pueblo canta, dios lo ama.

Nacemos para vivir, por eso el capital más importante que tenemos es el tiempo, es tan corto nuestro paso por este planeta que es una pésima idea no gozar cada paso y cada instante, con el favor de una mente que no tiene limites y un corazón que puede amar mucho más de lo que suponemos.

Ama hasta convertirte en lo amado, es más, hasta convertirte en el amor.

De mi madre aprendí que nunca es tarde, que siempre se puede empezar de nuevo; ahora mismo le puedes decir basta a los hábitos que te destruyen, a las cosas que te encadenan, a la tarjeta de crédito, a los noticieros que te envenenan desde la mañana, a los que quieren dirigir tu vida por el camino perdido.

Ahora mismo le puedes decir basta al miedo que heredaste, porque la vida es aquí y ahora mismo.

Vive de instante en instante, porque eso es la vida.

No te sientas aparte y olvidado, todos somos la sal de la tierra.

En la tranquilidad hay salud, como plenitud, dentro de uno. Perdónate, acéptate, reconócete y ámate. Recuerda que tienes que vivir contigo mismo por la eternidad.

Borra el pasado para no repetirlo, para no tratarte como te trataron ellos; pero no los culpes, porque nadie puede enseñar lo que no sabe, perdónalos y te liberarás de esas cadenas.

Si estás atento al presente, el pasado no te distraerá, entonces serás siempre nuevo.

Tienes el poder para ser libre en este mismo momento, el poder está siempre en el presente porque toda la vida está en cada instante.

¡Pero no digas no puedo ni en broma, porque el inconsciente no tiene sentido del humor, lo tomará en serio, y te lo recordará cada vez que lo intentes!


"Cuando me fui de mi casa, niño aún, mi madre me acompañó a la estación y cuando subí al tren me dijo: ‘Este es el segundo y último regalo que puedo hacerte: el primero fue darte la vida, el segundo la libertad para vivirla’".


ANECDOTAS DE FACUNDO CABRAL CONTADAS POR EL MISMO

Tomado de la página oficial: http://www.facundocabral.net

"El ahijado"

El poeta indio Tagore, que bautizara "mahatma", es decir, alma grande, a Ghandi, decía que cuando el hombre trabaja, Dios lo respeta, más cuando el hombre canta Dios lo ama.

Mi madre poco antes de morir, me dijo: muero contenta porque cada vez te pareces más a lo que cantas.

Juan Francisco, mi ahijado, dice, a sus dos años de edad, que soy artista porque canto, y que canto para poder comprarle chocolates, que es lo más razonable que escuché sobre mi oficio.


Borges

Cuando le pregunté a Borges porqué no había libros suyos en su biblioteca, me dijo: porque sigo teniendo el hábito de la buena lectura.

Cuando le pregunte qué le había parecido Arreola, que acababa de visitarlo, me dijo: es un verdadero caballero, me dejó dos o tres silencios.

Cuando le pregunté por Cien años de soledad, que le habían leído, me dijo: los primeros cincuenta años son memorables...

Al verme asombrado por su presencia en mi concierto, Ray Bradbury me dijo: me asombra que se asombre de encontrar un Bradbury viniendo de un país que tiene un Borges que es asombroso.

La Madre Teresa de Calcuta

Pregunté a la Madre Teresa en Calcuta: ¿cuándo descansa? y me dijo: Descanso en el amor. Le pregunté: ¿cuál es el lugar del hombre? y me dijo: Donde sus hermanos lo necesitan. 
Le dije: nunca la escuche hablar de política, y me dijo: Yo no puedo darme el lujo de la política, una sola vez me detuve 5 minutos a escuchar un politico, y en esos 5 minutos se me murió un viejecito en Calcuta.

Cada vez que yo entraba a la casa de la Madre Teresa, sentía que Dios recién había salido.

Una señora, impresionada por verla bañar a un leproso, le dijo: yo no bañaría a un leproso ni por un millón de dolares, a lo que Teresa contestó: Yo tampoco porque a un leproso solo se lo puede bañar por amor.

El viejo Tarahumara, el campesino chino

Pregunté a un viejo Tarahumara porqué no usaban armas para defenderse de los cuatreros, y me dijo: Si las armas fuesen necesarias, habríamos nacido con ellas.

Me dijo un campesino chino: Si quieres ser felíz un día emborrachate, si quieres ser felíz una semana cásate, si quieres ser felíz toda la vida se jardinero.


El maestro Rubinstein

En el Campo di Fiore, en el trastevere romano lo encontré, dándole migajas a las palomas. Le pregunté: ¿Usted es el que yo creo? y me dijo: Yo soy el que tú quieras. Le pregunté: ¿Usted es el maestro? Y me dijo: No, maestro es el que te puso delante de mi y a mi delante de ti. Yo soy Arthur Rubinstein.

El regalo de la libertad

Cuando me fuí de mi casa, niño aún, mi madre me acompañó a la estación, y cuando subí al tren me dijo: Este es el segundo y último regalo que puedo hacerte, el primero fue darte la vida, el segundo la libertad para vivirla.

La oración dilecta de mi madre decía: Señor, te pido perdón por mis pecados, ante todo por haber peregrinado a tus muchos santuarios, olvidando que estás presente en todas partes. En segundo lugar, te pido perdón por haber implorado tantas veces tu ayuda, olvidando que mi bienestar te preocupa más a ti que a mi. Y por último te pido perdón por estar aquí pidiéndote que me perdones, cuando mi corazón sabe que mis pecados son perdonados antes que los cometa, ¡ tanta es tú misericordia amado Señor!.

La mayoría es buena gente

Alguna vez me preguntó mi madre: ¿cuándo vas a dejar de pelear para comenzar a vivir?, ¡porque no se pueden hacer las dos cosas a la vez!

Mi madre creía que que el día del Juicio Final el Señor no nos juzgará uno por uno -ardua tarea- sino el promedio, y si juzga el promedio estamos salvados porque la mayoría es buena gente.
El bien es mayoría, pero no se nota porque es silencioso -una bomba hace más ruido que una caricia, pero por cada bomba que destruye, hay millones de caricias que construyen la vida-.
Diría mi madre: Si los malos supieran qué buen negocio es ser bueno, serían buenos aunque sea por negocio.





Otros vínculos Para ampliar más sobre la vida y obra de FACUNDO CABRAL:



jueves, 7 de julio de 2011

La creadora del mundo de Heidi: JOHANNA SPYRI, en el 110 aniversario de su muerte



En los 110 años de su muerte
 La creadora del mundo de Heidi

Corrían los fines de los años 70’s  y tanto niños como adultos vivíamos fascinados por la magia de la televisión. Las series de dibujos animados de origen japonés, eran muy apreciadas, a pesar de las imágenes en  blanco y negro que aún no daban paso a la vistosidad de los otros colores en la pantalla chica (a mi pueblo llegaría el primer televisor a color en 1981).

Como no recordar a El Capitan Centella, a Remi (sin familia), Marco (De los Apeninos a Los Andes), Corazon y Heidi.

Heidi seria la mas famosa entre todas las sagas infantiles. La historia conmovedora de aquella pequeña nina huérfana de los Andes, que aprende de la vida y del mundo al lado de su abuelo, del perro Niebla, Pedro , las cabras y demás amigos marco a muchos de nosotros durante nuestra infancia.

Un 7 de julio , un día como hoy pero de 1901, o sea hace exactamente 110 anos moria la autora del mundo heidiano: JOHANNA SPYRI.

"Desde la risueña y antigua ciudad de Maienfeld parte un sendero que, entre verdes campos y tupidos bosques, llega hasta el pie de los Alpes majestuosos, que dominan aquella parte del valle. Desde allí, el sendero empieza a subir hasta la cima de las montañas a través de prados de pastos y olorosas hierbas que abundan en tan elevadas tierras".

Con esta poética descripción, comienza la más famosa de las obras de esta autora, que ha hecho las delicias de todos los niños del mundo durante varias generaciones: Heidi.
Johanna Spyri nació en Suiza como Johanna Louise Heusser, el 12 de junio de 1827, en la aldea de Hirzel, en las alturas, a unos 11 km de Zúrich.

Hirzel es un pequeño poblado emplazado en la verde falda de una colina. Para llegar hasta allí hay que atravesar extensos bosques de pinos; cuando estos terminan, el sendero está bordeado por árboles frutales. En la aldea hay flores por doquier, las casas son pequeñas y confortables, teniendo la mayoría de ellas una huerta y también jardín.

Johanna fue la cuarta hija del matrimonio formado por el Dr. Johann Heusser y de la poetisa Meta Sebweizer. Su casa blanca, que aún se conserva, esta ubicada en las afueras de Hirzel, justo cuando el terreno comienza a ascender la montaña verde. Desde la ventana del piso superior, se obtiene una vista de los pinos y del Lago de Zúrich. Johanna fue una niña sensible, con enorme amor por la música, las aves y las flores de los campos alpinos y de los bosques cercanos a su hogar.

La escuela a la cual concurrió primero Johanna, y luego sus hermanos, había sido un granero en medio de un sembradío. Seguramente su primer maestro debió haber sido muy poco hábil para confundir su timidez con holgazanería, humillándola constantemente ante toda la clase. El resultado fue que la sacó de allí y la envió a la otra escuela de la aldea, que funcionaba en casa del pastor de la villa.

A los 14 años, Johanna fue a vivir a Zúrich a la casa de una tía, y allí asistió durante dos períodos lectivos a clases de idiomas extranjeros contemporáneos, al mismo tiempo que tomó lecciones de piano. Luego pasa un año en un internado de la ciudad de la Suiza francófona, Yverdon.

Su afición musical siempre fue evidente. Le gustaba mucho el piano, hasta que escuchó el sonido del arpa. Un día, cuando ella y su amiga Netti Fries caminaban por las calles de la ciudad, vieron un arpa en el escaparate de una tienda musical. Decidieron comprarla pero no tenían el dinero suficiente. Sacrificaron entonces sus ahorros, juntaron el dinero de ambas e hicieron la compra. Como no se decidían en cual de las casas quedaría guardada el arpa, llegaron a un acuerdo: la intercambiarían cada dos semanas. Así fue que Johanna cumplió uno de sus más grandes sueños: aprender ese difícil pero bello instrumento de cuerdas.

Durante siete años, entre 1845 y 1852, Johanna se transforma en maestra de sus hermanas menores, aprovechando el tiempo libre para hacer lecturas que fueron enriqueciendo su capital intelectual y espiritual. En las épocas de vacaciones, su afinidad con la naturaleza la llevaba hacia la región de Chur, escenario que luego sería trasladado como la principal escenografía de la acción de Heidi.

En 1852, su vida cambia radicalmente. Su hermano Theodor, estudiante de medicina, tenía un amigo estudiante de derecho, Bernard Spyri, quien desarrollaba también las tareas de editor del diario Confederated Newspaper. En una oportunidad, cuando Bernard visita a Theodor, conoce a Johanna, se enamora de ella y terminan casándose, radicándose definitivamente en Zúrich.

Para ocupar el tiempo que le quedaba libre y para no sentirse tan sola, sobre todo porque sentía mucha nostalgia de sus lugares, comienza a participar, junto con dos amigas, en un grupo artístico y literario. No obstante estas distracciones, su espíritu va decayendo hasta sumirse en una honda depresión y un sentimiento de soledad superlativo que la hicieron sentirse realmente enferma. Esta vivencia sería trasladada luego a la historia de Heidi, cuando la niña debe dejar Suiza para vivir en Fráncfort, lejos del aire puro y del sonido del viento entre las hojas de los pinos. Sólo pudo superar esta dolencia cuando nació su hijo, Bernhard, en 1855.

A partir de 1868, el Sr. Spyri es nombrado contador de la ciudad. Debido a las nuevas obligaciones y a tener que frecuentar otros círculos sociales, el matrimonio se muda a una casa en el centro de Zúrich, cercana al lago. Su hijo, a la vez, avanza en sus estudios musicales y llega a ser un buen violinista, ejecutando dúos con su madre al piano. Es durante esta época que Johanna comienza a escribir con intensidad, con el objeto de recaudar fondos para la Cruz Roja Internacional y su primer libro Una hoja en la tumba de Vrony, ve la luz en 1871, firmada sólo con las iniciales J.S. En 1870, cuando Johanna tenía 43 años, mientras Europa soportaba la Guerra Franco-Prusiana, con la intención de hacerle pasar momentos gratos a su hijo, su pluma abordó con pasión los propios recuerdos infantiles, que fueron plasmándose con maestría infinita en la vida de la niña huérfana que va a vivir a las montañas con su abuelo. Había nacido Heidi, que sería publicado diez años más tarde, en 1880, ya con el nombre de su autora, de ahí en más: Johanna Spyri.

Entre 1872 y 1873, continúa produciendo obras narrativas, enlazadas por un tema en común: las felices vivencias del pasado, de la infancia y adolescencia, ensambladas en el proceso del cambio interior que el presente ocasionaba.

A partir de 1879 comienza el período más productivo en la narrativa de Johanna, escribiendo veinte libros en cinco años, período que corresponde a la publicación de Heidi.

1884 es un año que la marcaría para siempre, pues fallecen primero su hijo, aquejado de una larga enfermedad, y luego su esposo y compañero, quedando sola en la vida. Decide mudarse de casa, consigue una vivienda más céntrica, y una sobrinita va a vivir con ella para que no se sintiera completamente sola. A partir de entonces Johanna hace muchas obras de caridad y escribe para deleitar a su sobrina, tal como había hecho con su hijo tres lustros atrás.

Viuda a los cincuenta y tres años, Johanna Spyri vivió serenamente en Zúrich, escribiendo muchos cuentos sobre los niños que viven en las montañas, con sus costumbres y sus juguetes que ellos mismos fabricaban, y su continuo diálogo con los animales y los paisajes del entorno. Así, en los últimos años de su vida, entre 1886 y 1901, escribe cuarenta y ocho cuentos, tomando vacaciones durante los primeros meses del nuevo siglo pues su agotamiento era muy grande. Se traslada entonces a distintos puntos de los Alpes suizos, llega también al norte de Italia, e incursiona por el Lago de Ginebra.

Esos relatos comenzaron a adquirir fama en el mundo exterior, Johanna comenzó a hacerse muy conocida y el requerimiento de los críticos, editores y gente de letras era permanente, por lo cual la autora de Heidi evadió cada vez más el contacto con el público. Deseaba sinceramente evitarlo, porque prefería "no exponer los aspectos más íntimos y profundos de su alma ante los ojos humanos”.

Falleció en Zúrich, el 7 de julio de 1901.

Suiza siente verdadero orgullo de Johanna Spyri y su obra, y las ha homenajeado en múltiples oportunidades en sellos postales y moneda. Evidentemente, Heidi resultó a todas luces más famosa que su creadora ya que es, sin lugar a dudas, uno de los personajes más conocidos de la literatura suiza en general y de la literatura infantil en particular. No sólo es una figura literaria, un personaje de ficción, sino que es la encarnación alegórica de la sociedad suiza pues representa la naturaleza intacta de los Alpes con sus praderas, montañas y paisajes idílicos.

Además de la serie de "Heidi", otros libros de la autora son: Grittli, Jörli, La pequeña salvaje, El lago de los ensueños, Luisita, Sin patria, Heimatlos", Sina y Verirrt und Gefunden".


HEIDI DE LOS ALPES
DATOS GENERALES
Nombre originalAlps no shojo Heidi
Historia originalJohanna Spyri (Libros "Heidi" y "Otra vez Heidi")
Serie de TV52 episodios de 25 min c/u
Película1 Película de 107 min. con un resumen de toda la serie.
Año de producción1974
DirectorIsao Takahata
GuiónYoshiaki Yoshida
DiseñoYoichi Otabe, Hayao Miyazaki
AnimaciónToshiyasu Okada
MúsicaTakeo Watanabe
ProducciónZuiyo, Fuji TV

HEIDI
Estrenos:

España Finales años 70
Duración: 20 minutos.
Género: Producción: 

En España fue la segunda serie japonesa emitida (la primera fue "meteoro speed racer"). en 1975 por tve-1.
 HEIDI
Quizá ha sido una de las series con la que más hemos llorado. Entrañables esas escenas de Heidi cuando vuelve a las montañas, cuando Clara comienza a caminar.
Estos dibujos fueron uno de los grandes éxitos de RTVE, todos permanecíamos los sabados por la tarde pendientes de esta niña con los mofletes sonrojados



Heidi es una niña que vive en los Alpes junto a su abuelito. Heidi saca a pastar a las cabras y juega con su perro Niebla, su cabrita Copo de Nieve, su pajarito Pichi y su amigo Pedro. La historia cuenta sobre todo esto, y ademas de cuando Heidi es llevada a la ciudad para acompañar a Clarita, una niña minusválida muy solitaria, y la pobre Heidi se ve en la situación de tener que aprender a vivir usando maneras educadas y sufrir los regaños de la institutriz de Clara (la Señorita Rottenmayer). Despues de mucho tiempo, el Padre de Clara se entera que Heidi está muy triste y entonces la deja volver donde su abuelito.
Otros personajes que aparecen en la serie son la madre y la abuela de Pedro. Esta última era ciega, y quería mucho a Heidi.
Una característica de heidi son sus mejillas coloradas (claro, si vive en la montaña donde a la gente se le sale la salud hasta por los cachetes). Una de las cosas que recuerdo de cuando niño es unas figuras de plumavit de heidi y los demas personajes que me compraba mi familia. A mi me gustaban mucho y parece que por la época eran muy populares.
En ingles, el nombre de la serie es "Heidi, girl in the Alps" y en Japones es "Alps no Shojo Heidi". Tiene 52 capítulos y fue producida durante 1974 por la compañía Zuiyo Enterprise.
La serie de televisión está basada en la novela alemana de Juana Spiry del mismo nombre. También existe una pelicula basada en esta novela, con Shirley Temple interpretando el papel de Heidi.
 

Canción de entrada

La canción de la serie
Abuelito dime tú
lo que dice el viento en su canción
abuelito dime tú
por qué llovió por qué nevó
 
Dime por qué hasta aquí subí
dime por qué yo soy tan feliz
abuelito, nunca yo de tí me alejaré

Abuelito dime tú
que el abeto a mí me vuelve a hablar
abuelito dime tu
por qué la luna ya se va

Dime por qué hasta aquí subí
dime por qué yo soy tan feliz
abuelito, nunca yo de ti me alejaré
Canción de salida

Mira el sol..
como sale..
por detras de las montañas..
la cabaña ya se abrió...
que bien..!!
junto a las cabritas correré.

Cuando llegue Pedro jugaré con él
y veré la nieve derretirse al sol...
oye ya ,...
como niebla
como corre y como salta
ya resalta el cielo azul
Que bien!
Junto a las cabritas correré
Cuando llegue Pedro.....



Bibliografía: