jueves, 27 de octubre de 2011

Padre Tulio Cadavid. mxy (1918-1998)

Padre Tulio Cadavid Tobon (1918-1998)





Pedagogo de muchas generaciones del IMEY

Nació el 25 de junio de 1918, en San Pedro de los Milagros.

Ingresó al seminario en enero de 1933. 
Ordenado sacerdote el 30 de noviembre de 1943.
Su trabajo apostólico lo realizó desde San Martín de Loba en la Costa Atlántica hasta Bucaramanga, donde se desempeñó como secretario privado de Monseñor Anibal Munoz Duque. Profesor del Seminario en Yarumal y Medellin en varias ocasiones. Párroco en Vélez (Santander) y Puente Aranda ( en Bogotà). Murio en La casa de Emaus de Medellin el 27 de octubre de 1998, despues de una larga enfermedad.


El padre Tulio como su nombre que viene de “Tulius” de origen latín y que significa “elevado por Dios” irradió en su vida dicha definición. 
Tuve la dicha de conocer a “Tulito” como le llamábamos en 1988, justo cuando empezaba mi primer año de filosofía en el Seminario Mayor de Medellín.  Para esta época, y viendo sus coordenadas (o número telefónico  1918-1998) frisaba los 70 años. Se le veía, a pesar de su figura enjuta  (cual quijote soñador y entusiasta por la aventura de la vida) sonriente,  con un muy buen sentido del humor propio del paisa, dichoso,  apasionado por la enseñanza de la teología y las ciencias, la música y la poesía.


Sin lugar a dudas,  fue un referente “mayor”, el “viejo sabio” que azuzaba nuestra curiosidad por la ciencia, la teología, la filosofía y la misión. 
El padre Cadavid fue de los primeros misioneros que me hizo ver de manera palpable que el estudio  (la teoría) complementa la acción (práctica).


El padre Tulito por ejemplo cuando nos daba clases de Antropología Filosófica mostraba en su cátedra una profunda humanidad, una admirable fe y una inmensa sabiduría. 
Su sentido del humor no era por menos deslumbrante y magnífico. A Tulio, si uno le ofrecía la mano para saludarle, solía contestar: “No sea lambón, vaya a lamber a otra parte”. O cuando sorprendía algún seminarista tomando café en la sala de acogida de la Casa de Emaús (residencia de los hermanos mayores) increpaba: “no venga aquí a tomarse el tinto de los viejitos, no sea descarado, para eso tienen también allá en el seminario su cafetera”. 
Así era Tulito cómico punzante con ironía y sarcasmo. Recuerdo también sus grandes virtudes musicales. En su cuarto de Emaús tenía un inmenso y antiguo órgano del cual arrancaba bellas piezas de su propia inspiración. 
Alguna vez, durante los minutos de descanso, yo fui afortunado con algunos otros a quienes nos condujo en su cuarto, para respirar un poco de su intimidad y timidez, y por lo tanto empaparnos de su sapiencia y poesía. Una de las cosas que hizo Tulito fue comenzar a interpretar sobre el clásico piano una melodía celeste, sin voz, siguiendo una partitura, era un pasillo que nunca olvidaré y que me conmovió al menos a mí intensamente. Una vez terminada la bella composición, nos dijo que se llamaba “Lejano azul” y que era de su propia inspiración…No sé si Tulito dejaría entre su legado musical aquella linda melodía, pero en conclusión si algo aprendí y aprecié del Padre Cadavid fue su talento para la música…

Hoy 27 de octubre, ya hace  hace 13  años  que Tulito fue llamado a la Casa del Padre.

Gracias Padre Tulio por no habernos inspirado y habernos dejado tu flor, tu música y tu sabiduría...

martes, 25 de octubre de 2011

30 de octubre del 2011: 31o domingo del tiempo ordinario A



EVANGELIO

LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MATEO 23, 1-12



En aquel tiempo, Jesús habló a la gente y a sus discípulos, diciendo:

-- En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los fariseos: haced y cumplid lo que os digan; pero no hagáis lo que ellos hacen, porque ellos no hacen lo que dicen. Ellos lían fardos pesados e insoportables y se los cargan a la gente en los hombros, pero ellos no están dispuestos a mover un dedo para empujar. Todo lo que hacen es para que los vea la gente: alargan las filacterias y ensanchan las franjas del manto; les gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; que les hagan reverencias por la calle y que la gente los llame maestros. Vosotros, en cambio, no os dejéis llamar maestro, porque uno solo es vuestro maestro, y todos vosotros sois hermanos. Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra, porque uno solo es vuestro Padre, el del cielo. No os dejéis llamar consejeros, porque uno solo es vuestro consejero, Cristo. El primero entre vosotros será vuestro servidor. El que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.



Palabra del Señor.



A guisa de introducción:



SERVICIO Y PODER



Hay una película francesa del año 2010 que ha causado gran impacto mundial y se llama “Des hommes et des dieux” (de dioses y hombres).  En Canadá, fue presentada a finales del año pasado.






Basada en hechos reales, es la  historia de un monasterio en las montañas del Magreb en los años noventa. Ocho monjes cistercienses viven en perfecta armonía con la población musulmana, pero paulatinamente la violencia y el terror se instalan en la región.



Un grupo de fundamentalistas islámicos asesina a un equipo de trabajadores extranjeros y el pánico se apodera de todos. El ejército ofrece protección a los monjes, pero estos la rechazan.



¿Qué deben hacer? ¿Irse, quedarse? A pesar de las crecientes amenazas que los rodean, la decisión de los monjes de quedarse se hace más firme día tras día. Empiezan a darse cuenta de que no tienen elección y deben quedarse, cueste lo que cueste.



La película recoge, a grandes rasgos, la vida de los monjes cistercienses del Tibhirine, en Argelia, del año 1993 hasta su secuestro y masacre en 1996.



Actualmente se está presentando en Colombia, pero solamente en Bogotá y Medellín  (http://cine.colombia.com/pelicula/i3414c0p0/de-dioses-y-hombres-of-gods-and-men?id=3414&idc=0&p=0),  y lástima que no la hayan proyectado en las otras ciudades , cuando es un film verdaderamente magnifico que permite contemplar y reflexionar acerca de valores tan sublimes como la fe en la providencia, la fidelidad a la vocación a la vida consagrada, el amor por el servicio, el dialogo y tolerancia interreligiosos, etc.

Pues bien, les recomiendo verla.



Sucede que en esta misma cinta, el hermano Christian, el prior o abad del monasterio, es invitado a cuestionarse sobre su manera de ejercer la autoridad. Éste mismo, acaba de tener un encuentro frente a frente con los terroristas,  negándose a ceder a su requerimiento, ya que querían llevarse con ellos al hermano Luc, el médico del claustro. Su decisión traerá graves y pesadas consecuencias para el avenir de la comunidad. Sus hermanos le recuerdan que él no ha sido elegido para tomar solo las decisiones.



El ejercicio del poder es siempre delicado. Es verdad esto, tanto en la sociedad como en la Iglesia. Y es aún más verdadero en lo que concierne o mira el poder espiritual, cuando se dice actuar en nombre de Dios.



En el evangelio de hoy, Jesús les reprocha a ciertos fariseos el abusar de su poder en el ejercicio de su autoridad. Algunos se aprovechan de su posición para descargar sobre el pueblo pesos insoportables que ellos mismos no intentan siquiera mover ni con su dedo menique. Ellos dicen (predican) y no hacen (practican). Algunos pretenden imponerse o mostrarse como modelos para los demás, mas no se interesan que en sus fachadas.



Nuestra Iglesia no es perfecta. Y no lo será jamás. Ella está compuesta y dirigida por seres humanos. Los errores y los abusos del pasado nos recuerdan que nosotros siempre tenemos necesidad de convertirnos. No podemos olvidarnos (ser negligentes ante)  de la organización, de tareas a cumplir y de las funciones a ejercer. Pero cada persona que tiene una responsabilidad en la comunidad eclesial debe recordar que ella está ante todo, al servicio de los otros.





APROXIMACION PSICOLOGICA Y POLITICA DEL TEXTO:



En el cristianismo primitivo hay una inspiración de igualdad que tiene sus raíces en las mismas  enseñanzas de Jesús.



Como aquellos holandeses que hacen recular el mar para recuperar tierras arables (o cultivables), Jesús ha hecho volver atrás su familia y las tradiciones de su tiempo para recuperar para si un terreno personal que sería su espacio vital.



 Sobre este terreno, Jesús vivió su vida y su búsqueda de Dios, y nadie vino a dictarle o decirle cómo tomarlo.



Ahora, aquí, Jesús recomienda de modo parecido a sus discípulos de vigilar también ellos sobre su espacio vital y no dejar a ninguna autoridad religiosa venir regir sus vidas. “No llamen a nadie Padre sobre la tierra” (v.9) ; no dejar a nadie tomar el poder sobre su vida.



Este compromiso radical con la libertad, encontrará algunos años  más tarde eco en San Pablo quien preguntará: “es que acaso mi libertad va a ser  juzgada por la conciencia de otro?” (1 Cor 10,29).



No tengan entre ustedes ni “Padre”, “ni doctores”, “ni maestro”, porque ustedes todos son “hermanos” (v.8), dice Jesús. De cara a los otros, ustedes son fundamentalmente iguales y libres. Habiten totalmente su libertad y guárdense (eviten) de toda tentativa por domesticar la libertad de otro, por reinar sobre su conciencia.



Pablo comprenderá con buen derecho que la salvación, la liberación en Cristo son simultáneamente una tarea y un don, al igual que la vocación de toda una vida es al mismo tiempo un evento misterioso realizado en la muerte y resurrección de Jesús.



“Hemos sido liberados para la libertad”, escribirá Paul a los gálatas (en otras palabras: “es para que seamos verdaderamente libres que Cristo nos ha liberado”- Gal 5,1). “Sean fuertes y perseverantes y no se dejen dominar bajo el yugo de la esclavitud” (v.2). No dejen nada, ni posesiones, ni ideologías, ni a nadie tomar el poder sobre sus vidas…



Notemos finalmente la convergencia entre el pensamiento de Jesús y el de Pablo. Pablo no quiere que esta libertad caiga en el vacío, ni se obnubile o pierda en el egoísmo: “por amor, pónganse al servicio los unos de los otros” (v.13). Esto se relaciona con lo dicho por Jesús: “el más grande entre ustedes será su servidor” (v.11).



Mejor que ser esclavos y no pensar más que en nosotros, estamos llamados a ser libres y a pensar en los otros!





Ellos actúan siempre para ser vistos…



Cuan delicada es la misión del discípulo de Jesús. Bien puede él estar actuando con toda sinceridad y buena intención y puede ser que alguien le esté juzgando e interpretando mal su celo, su compromiso y trabajo, considerando que lo que hace, lo hace con el fin de ser visto, de ganar celebridad y que digan los demás: cómo trabaja! Míralo qué tan lindo cómo se ocupa de los demás, cómo se preocupa por la Iglesia…



Los textos de este 31o domingo nos hablan de malos ejemplos, de falsas imágenes, de la búsqueda de promoción, de corrupción, del abuso del poder : temas que conocemos muy bien. No tenemos sino que leer los periódicos y mirar la televisión para darnos cuenta que la Palabra de Dios se aplica también a nuestro mundo de hoy.



 La corrupción de los dirigentes a todos los niveles del gobierno, el abuso del poder de los ricos y de los poderosos que imponen su ley y no buscar que su interés, la irresponsabilidad de ciertos grupos religiosos de cara a las víctimas de pedofilia, la avaricia y la avidez de los bancos y de los sistemas financieros que provocan crisis económicas de manera continua, los numerosos escándalos de ciertos representantes políticos…todo ello ha creado una crisis de confianza sin precedentes en la historia de nuestras instituciones.



Cómo podemos llevar a los jóvenes a resolver sus diferencias de manera pacífica, cuando ellos ven cómo los adultos se valen de tácticas violentas para arreglar los conflictos, cuando ellos constatan la degradación sistemática y las campañas de suciedad en tiempo de elecciones para los puestos públicos, cuando ellos se dan cuenta de la ambición y avidez sin límites que reina en los gobiernos y en las empresas.



Cómo podemos convencer a los jóvenes que ejerzan su responsabilidad social y de que tengan compasión hacia los demás cuando una cantidad considerable de adultos  abusan regularmente de su poder para llenarse los bolsillos y cuando la corrupción parece ser la única manera de llegar al primer puesto en los deportes, la política o en los negocios?



La búsqueda de poder y de riqueza, la carrera por los honores y los privilegios, no son solamente abusos de la época de Jesús. Hoy, ya no es mas cuestión de “filacterias o de franjas muy largas” (como en los fariseos), sino que es cuestión de marca de auto, de estilo de vida extravagante, de aviones privados, de barco de diversión (o placer), de residencias de un lujo como de fantasía. Esta riqueza excesiva, expuesta en el gran día, aparece como un insulto para los miles de millones de pobres del planeta. El deseo de aparentar deviene entonces el objetivo de la vida. Al seguir estos abusos, uno comprende un poco la revuelta (revolución, protesta) de los “indignados” contra Wall Street y contra el sistema financiero actual.



Jesús  llama a aquellos que actúan para ser vistos : “hipócritas”, “actores”. Él invita a quitarse las máscaras y a dejar de interpretar (o jugar) la comedia. La vida no es un Halloween permanente! La autoridad de Jesus es exclusivamente una autoridad de servicio y de liberacion.

Un obispo italiano, Monseñor Tonfino Bello decía a los sacerdotes de su Diócesis: “En cada parroquia, debería haber a la vista un gran delantal como símbolo del servicio que los cristianos deben prestar a los demás. El delantal es el único vestido litúrgico mencionado  por Jesús. San Juan nos dice que la tarde del jueves santo, durante la primera eucaristía, el señor se vistió de una especie de delantal (amarró su túnica a la cintura) y comenzó a lavar los pies de sus apóstoles!”



En la segunda lectura de hoy, se nos da el ejemplo de San Pablo que ama y sirve a su comunidad de Tesalónica. Este hermoso texto nos brinda un remarcable retrato (perfil) del verdadero pastor: Él es “pleno de delicadeza, de dulzura, como una madre con sus bebes”. Él  se muestra  lleno de afecto para con ellos, queriendo darles no solamente el evangelio sino todo lo que él mismo es. Él pena y se fatiga noche y día para no ser una carga para los otros.



También Jesús nos dice en el evangelio de este domingo: “paren ya de darse títulos infladores: “No se dejen dar títulos, no busquen privilegios ni primeros puestos, ni actúen para conseguir ventajas personales”. Estos títulos arriesgan crear una apariencia engañosa, detrás la cual se esconde muy a menudo un vacío infinito.



La autoridad de Jesús es exclusivamente una autoridad de servicio y de liberación: Él perdona, sana, levanta, da una segunda oportunidad, abre un avenir. Esto permite avanzar en la alegría: “Yo les digo todo esto para que su alegría sea completa” (Juan 15,11). Es suficiente con contemplar o ver aquellos que se encuentran con Jesús: la samaritana, Zaqueo, María Magdalena, los ciegos, los leprosos…



Y es practicando la autoridad del servicio propuesta por Cristo que nosotros daremos una imagen positiva de Dios a la gente alrededor de nosotros.



Todo lo que hacen los escribas y fariseos es para que los vea la gente: alargan las filacterias y ensanchan las franjas del manto; les gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; que les hagan reverencias por la calle y que la gente los llame maestros. Pero entre ustedes, no debe ser así: “si alguien quiere ser grande entre ustedes, que él sea su servidor. Porque el Hijo del hombre no ha venido para ser servido, sino para servir y dar su vida por la multitud” (Mateo 20, 25-28).



REFERENCIAS :



1.Pequeño misal « prions en eglise », edición quebequense. Reflexión de Yves Chamberland.

2.     HÉTU, Jean-Luc. Les Options de Jésus.




4.     http://betania.es/historico/447-31dom-santos/index.htm
5.    http://cursillos.ca./ Reflexión cristiana de P. Yvon-Michel Allard,   s.d.v.

sábado, 22 de octubre de 2011

En los 105 años del nacimiento del autor del ALGEBRA

Durante dos años de mi formación en el bachillerato, en 3º y 4º después llamados 8º y 9º (1984 Y 1985, RESPECTIVAMENTE) y que cursé (por fortuna) en la Normal Nuestra señora de la candelaria de Marquetalia, me enfrenté al algebra.

 Reconozco que el primer año fue sumamente difícil para mí, los binomios, la solución de trinomios y las ecuaciones iniciales me dieron literalmente “en la cabeza”, mis profesores de la materia durante estos años fueron Don Ever Ospina y don Alirio Hurtado, respectivamente.  Recuerdo que las tareas más largas y dispendiosas y que nos hacían trasnochar junto a la preparación de las clases (pues éramos practicantes pedagógicos)  eran las del bendito libro de Aurelio Baldor. 


Don Alirio en la introducción de estas materias matemáticas como álgebra y trigonometría, para motivarnos , nos decía que algún día les encontraríamos utilidad, cuando fuéramos pilotos de avión o capitanes de barco...ya que para el momento, la mayoría de los alumnos ( más apáticos y enemigos de los números  que otra cosa)  no le veíamos oficio a la tal materia.

Además, nuestro instructor matemático   nos sugería realizar la totalidad de ejercicios de hasta 150 operaciones; era bien  una  sugerencia (no era obligatorio) porque según él, entre más uno practicaba más fácil se hacía la comprensión y  por ende la resolución y éxito en las previas (o exámenes).


Evoco como yo era uno de los pocos que  realizaba la totalidad de  los ejercicios, ante cuya actitud , los otros compañeros más negligentes , perezosos e indisciplinados, je,je ,nos juzgaban de “lambones” “chupas” o “regalados” como se decía en la época a los alumnos que aparentemente querían complacer a sus profesores o aparecer muy “pilos” y estudiosos en el salón de clase (qué diferencia con los tiempos de hoy!)


Bueno, esta corta introducción viene a colación para hacerle un sencillo homenaje al autor de uno de los libros más consultados y manipulados en los centros de educación media: EL ÁLGEBRA.

Cuando uno veía y aun hoy uno ve la caratula del álgebra, piensa que el señor diseñado ahí,  árabe, con barba rala y turbante, y mirada “ desdeñosa” era  el autor... La portada presenta su tradicional imagen del matemático Abu Abdallah Muḥammad ibn Mūsā al-Jwārizmī (Abu Yāffar) (أبو عبد الله محمد بن موسى الخوارزمي ابو جعفر), conocido generalmente como al-Juarismi, quien fue un matemáticoastrónomo y geógrafo persa musulmán, que vivió aproximadamente entre 780 y 8504 y al fondo un asimilación de la natal Bagdad de Al-Juarismi que cubre parte de la portada delantera y la posterior, (wikipedia.org)
pero no, cuán lejos estábamos de sospechar que el autor AURELIO ANGEL BALDOR, era mas cubano que el habano y había nacido en la isla de Fidel,  y que había muerto 7 años atrás (pues hablo de los años 1984 y 1985).


Pues bien un día como hoy, el 22 de octubre de 1906 nacía A. BALDOR,como se le conoce,  o sea hace 105 años.



BIOGRAFIA








AURELIO ANGEL BALDOR:

(1.906 - 1.978), el autor del libro que más terror despierta en los estudiantes de bachillerato de toda Latinoamérica, no nació en Bagdad. Nació en La Habana, Cuba, y su problema más difícil no fue una operación matemática, sino la revolución de Fidel Castro. Esa fue la única ecuación inconclusa del creador del Algebra de Baldor, un apacible abogado y matemático que se encerraba durante largas jornadas en su habitación, armado sólo de lápiz y papel, para escribir un texto que desde 1941 aterroriza y apasiona a millones de estudiantes de toda Latinoamérica.


El Algebra de Baldor, aún más que El Quijote de la Mancha, es el libro más consultado en los colegios y escuelas desde Tijuana hasta la Patagonia. Tenebroso para algunos, misterioso para otros y definitivamente indescifrable para los adolescentes que intentan resolver sus "misceláneas" a altas horas de la madrugada, es un texto que permanece en la cabeza de tres generaciones que ignoran que su autor, Aurelio Angel Baldor, no es el terrible hombre árabe que observa con desdén calculado a sus alumnos amedrentados, sino el hijo menor de Gertrudis y Daniel, nacido el 22 de octubre de 1906 en La Habana, y portador de un apellido que significa "valle de oro" y que viajó desde Bélgica hasta Cuba sin tocar la tierra de Scherezada.



Baldor, el grande


Daniel Baldor reside en Miami y es el tercero de los siete hijos del célebre matemático. Inversionista, consultor y hombre de finanzas, Daniel vivió junto a sus padres, sus seis hermanos y la abnegada nana negra que los acompañó durante más de cincuenta años, el drama que se ensañó con la familia en los días de la revolución de Fidel Castro.


"Aurelio Baldor era el educador más importante de la isla cubana durante los años cuarenta y cincuenta. Era fundador y director del Colegio Baldor, una institución que tenía 3.500 alumnos y 32 buses en la calle 23 y 4, en la exclusiva zona residencial del Vedado. Un hombre tranquilo y enorme, enamorado de la enseñanza y de mi madre, quien hoy lo sobrevive, y que pasaba el día ideando acertijos matemáticos y juegos con números", recuerda Daniel, y evoca a su padre caminando con sus 100 kilos de peso y su proverbial altura de un metro con noventa y cinco centímetros por los corredores del colegio, siempre con un cigarrillo en la boca, recitando frases de Martí y con su álgebra bajo el brazo, que para entonces, en lugar del retrato del sabio árabe intimidante, lucía una sobria carátula roja.


Los Baldor vivían en las playas de Tarará en una casa grande y lujosa donde las puestas de sol se despedían con un color distinto cada tarde y donde el profesor dedicaba sus tardes a leer, a crear nuevos ejercicios matemáticos y a fumar, la única pasión que lo distraía por instantes de los números y las ecuaciones. La casa aún existe y la administra el Estado cubano. Hoy hace parte de una villa turística para extranjeros que pagan cerca de dos mil dólares para pasar una semana de verano en las mismas calles en las que Baldor se cruzaba con el "Che" Guevara, quien vivía a pocas casas de la suya, en el mismo barrio.


"Mi padre era un hombre devoto de Dios, de la patria y de su familia", afirma Daniel. "Cada día rezábamos el rosario y todos los domingos, sin falta, íbamos a misa de seis, una costumbre que no se perdió ni siquiera después del exilio". Eran los días de riqueza y filantropía, días en que los Baldor ocupaban una posición privilegiada en la escala social de la isla y que se esmeraban en distribuir justicia social por medio de becas en el colegio y ayuda económica para los enfermos de cáncer.



Algebra del exilio


El 2 de enero de 1959 los hombres de barba que luchaban contra Fulgencio Batista se tomaron La Habana. No pasaron muchas semanas antes de que Fidel Castro fuera personalmente al Colegio Baldor y le ofreciera la revolución al director del colegio. "Fidel fue a decirle a mi padre que la revolución estaba con la educación y que le agradecía su valiosa labor de maestro..., pero ya estaba planeando otra cosa", recuerda Daniel.


Los planes tendría que ejecutarlos Raúl Castro, hermano del líder del nuevo gobierno, y una calurosa tarde de septiembre envió a un piquete de revolucionarios hasta la casa del profesor con la orden de detenerlo. Sólo una contraorden de Camilo Cienfuegos, quien defendía con devoción de alumno el trabajo de Aurelio Baldor, lo salvó de ir a prisión. Pero apenas un mes después la familia Baldor se quedó sin protección, pues Cienfuegos, en un vuelo entre Camagüey y La Habana, desapareció en medio de un mar furioso que se lo tragó para siempre.


"Nos vamos de vacaciones para México, nos dijo mi papá. Nos reunió a todos, y como si se tratara de una clase de geometría nos explicó con precisión milimétrica cómo teníamos que prepararnos. Era el 19 de julio de 1960 y él estaba más sombrío que de costumbre. Mi padre era un hombre que no dejaba traslucir sus emociones, muy analítico, de una fachada estricta, durísima, pero ese día algo misterioso en su mirada nos decía que las cosas no andaban bien y que el viaje no era de recreo", dice el hijo de Baldor.


Un vuelo de Mexicana de Aviación los dejó en la capital azteca. La respiración de Aurelio Baldor estaba agitada, intranquila, como si el aire mexicano le advirtiera que jamás regresaría a su isla y que moriría lejos, en el exilio. El profesor, además del dolor del destierro, cargaba con otro temor. Era infalible en matemáticas y jamás se equivocaba en las cuentas, así que si calculaba bien, el dinero que llevaba le alcanzaría apenas para algunos meses. Partía acompañado de una pobreza monacal que ya sus libros no podrían resolver, pues doce años atrás había vendido los derechos de su álgebra y su aritmética a Publicaciones Culturales, una editorial mexicana, y había invertido el dinero en su escuela y su país. La lucha empezaba.


Los Baldor, incluida la nana, se estacionaron con paciencia durante 14 días en México y después se trasladaron hasta Nueva Orleans, en Estados Unidos, donde se encontraron con el fantasma vivo de la segregación racial. Aurelio, su mujer y sus hijos eran de color blanco y no tenían problemas, pero Magdalena, la nana, una soberbia mulata cubana, tenía que separarse de ellos si subían a un bus o llegaban a un lugar público.


Aurelio Baldor, heredero de los ideales libertarios de José Martí, no soportó el trato y decidió llevarse a la familia hasta Nueva York, donde consiguió alojamiento en el segundo piso de la propiedad de un italiano en Brooklyn, un vecindario formado por inmigrantes puertorriqueños, italianos, judíos y por toda la melancolía de la pobreza. El profesor, hombre friolento por naturaleza, sufrió aun más por la falta de agua caliente en su nueva vivienda, que por el desolador panorama que percibía desde la única ventana del segundo piso.


La aristocrática familia que invitaba a cenar a ministros y grandes intelectuales de toda América a su hermosa casa de las playas de Tarará, estaba condenada a vivir en el exilio, hacinada en medio del olvido y la sordidez de Brooklyn, mientras que la junta revolucionaria declaraba la nacionalización del Colegio Baldor y la expropiación de la casa del director, que sirvió durante años como escuela revolucionaria para formar a los célebres "pioneros". La suerte del colegio fue distinta. Hoy se llama Colegio Español y en él estudian 500 estudiantes pertenecientes a la Unión Europea. Ningún niño nacido en Cuba puede pisar la escuela que Baldor había construido para sus compatriotas.



Lejos de la patria


Aurelio Baldor trató en vano de recuperar su vida. Fue a clases de inglés junto a sus hijos a la Universidad de Nueva York y al poco tiempo ya dictaba una cátedra en Saint Peters College, en Nueva Jersey. Se esforzó para terminar la educación de sus hijos y cada uno encontró la profesión con que soñaba: un profesor de literatura, dos ingenieros, un inversionista, dos administradores y una secretaria. Ninguno siguió el camino de las matemáticas, aunque todos continuaron aceptando los desafíos mentales y los juegos con que los retaba su padre todos los días.


Con los años, Baldor se había forjado un importante prestigio intelectual en los Estados Unidos y había dejado atrás las dificultades de la pobreza. Sin embargo, el maestro no pudo ser feliz fuera de Cuba. No lo fue en Nueva York como profesor, ni en Miami donde vivió su retiro acompañado de Moraima, su mujer, quien hoy tiene 89 años y recuerda a su marido como el hombre más valiente de todos cuantos nacieron en el planeta. Baldor jamás recuperó sus fantásticos cien kilos de peso y se encorvó poco a poco como una palmera monumental que no puede soportar el peso del cielo sobre sí. "El exilio le supo a jugo de piña verde. Mi padre se murió con la esperanza de volver", asegura su hijo Daniel.


El autor del Algebra de Baldor se fumó su último cigarrillo el 2 de abril de 1978. A la mañana siguiente cerró los ojos, murmuró la palabra Cuba por última vez y se durmió para siempre. Un enfisema pulmonar, dijeron los médicos, había terminado con su salud. Pero sus siete hijos, quince nietos y diez biznietos, siempre supieron y sabrán que a Aurelio Baldor lo mataron la nostalgia y el destierro.

(Revista Dinners, Colombia-2000).



miércoles, 19 de octubre de 2011

Evangelizando a Gabriel de Las Casas

Soy un asiduo radio escucha de “La Luciérnaga” de Caracol (sobre todo en diferido, gracias a los podcast: archivos de audio, que son posibles de descargar y luego escuchar sea en el i-pod, el celular,  el pc o el mp3).
 
Ocurre que esta es la semana preparativa al domingo mundial de misiones en nuestra iglesia.


Y me pareció curioso que ayer 18 de octubre, justo en el programa mencionado (y que escuché esta mañana) en el  día de San Lucas (uno de los evangelistas) como lo recordó bien  su Diana Uribe (caracterizada por la bella y talentosa Alexandra Montoya), Don  Hernán Peláez conductor y cabeza del programa decidió (en una acto de “atravesado” como él gusta llamar a sus compañeros cuando “meten la cucharada” o hablan cuando no es el momento) lanzarle la pregunta a Gabriel de las Casas sobre cuáles eran los otros 3 evangelistas…Gabriel dijo: “Juan, se quedó callado y después de un breve silencio instigado y tratado burlonamente por sus compañeros de aquí y de allá, siguió con otros nombres como Pedro, Mateo, Lucas y Juan…Es decir para Gabrielito los evangelistas eran 5 (o sea le sobró Pedro, que fue apóstol mas no evangelista, aunque si existe un evangelio suyo pero nunca fue reconocido oficialmente por la Iglesia católica).


Y no sigamos con lo que pasó con la pregunta acerca de “cuántos eran los jinetes del Apocalipsis”. 


En diferentes momentos de concursos de televisión como “Quien quiere ser millonario” y o “millones por montones”, los participantes han perdido la oportunidad de ganar por no haber memorizado ciertos datos de la Biblia, de la historia sagrada o de la Iglesia.


Pero me sorprendió ver el sábado pasado en la emisión  del concurso millonario de caracol presentado por  don Pablo Laserna, como un joven de escasos 20 años no supo responder o descifrar que un podcast es un archivo de audio, pero si supo responder en una cuestión siguiente sobre un sujeto religioso…Qué ironia…


Traigo a referencia todo esto no para criticar o deplorar la ignorancia religiosa de los periodistas o de los medios, pero si para exponer mi preocupación acerca del modo como se asume, se ve y se trata los conocimientos  y o la cultura religiosa (que debería ser el tema de otro artículo).


Y porque lo más importante no es aprender el catecismo de memoria o memorizar de cabeza literalmente versos de la Biblia, o datos de preguntas y respuestas exactas…No eso, no es lo esencial, pues “en la tarde de la vida- como dijo San Juan de la Cruz- seremos juzgados con amor y sobre el amor”.


Así que Gabriel no te preocupes por no haber sabido responder con exactitud, certeza y convicción a las preguntas (de tradicional catecismo) formuladas claro esta y se comprende en ese ambiente de hilaridad, mismo no interesa mucho si vas o no a la misa, lo que importa es que tengas claro en tu vida que “el amor es el motor de la existencia”, “el amor es el centro de la vida”. 

Jesús nos lo recuerda en el evangelio de este domingo mundial de las misiones; ante la pregunta hecha por sus adversarios que quieren hacerle hablar y o tenderle una trampa sobre “cuál es el mandamiento más grande o importante”, Jesús resume toda la ley en el amor a Dios, el amor al hermano como a sí mismo”…hay un solo amor. Y este es el único dato valido y suficiente,  que nos bastaría memorizar y hacer descender de la cabeza al corazón y luego traducirlo en nuestras manos (con nuestra profesión, actividad, trabajo), es decir VIVIRLO: EL AMOR.


Lo que brinda la verdadera felicidad es el amor, la compasión, el servicio a los hermanos y preferentemente los más necesitados.


No es necesario andarlo tampoco pregonando en la radio, en los espacios virtuales, y mismo cuando “no le nace a uno hablar de ello”, solo basta con el ejemplo, el testimonio en los pequeños gestos cotidianos: como padres de familia, hijos, profesores, alumnos,  en el medio de trabajo, de profesión y estudio.


Esa es la misión, el llamado que nos hace Dios cada mañana al despertar: AMAR, SERVIR CON ALEGRIA, porque al hacerlo lo estamos amando y sirviendo a Él.


Y bien por la Luciérnaga porque nos sirve con alegría, nos transmite optimismo, nos hace reír en momentos tan duros como lo que se pasan en la vida personal, social, del país y del mundo.


Durante esta semana oremos, pidiendo confiadamente al Señor que nos ayude a no dividir el mundo, a no dividir una única realidad donde Dios y el prójimo deberían determinar el ritmo y la calidad de nuestras vidas; el mundo de Dios (de la espiritualidad, de la fe…) y de Cesar (la realidad política, social…) es uno solo


Pidamos a Dios a vivir con coherencia dentro y fuera del templo, que superemos el mero rezo y la asistencia al culto, expresando nuestra fe con las manos y los actos de servicio, solidaridad y compasión…


Este domingo mundial de oración por las misiones nos recuerda una vez más que lo más importante y esencial así no aparezca ( y si rara vez o nunca) en el twitter es AMAR a Dios y al prójimo como a si mismo…


Buen día!