Hoy LEOPOLDO DANTE TEVEZ, más conocido como LEO DAN cumple un año más de vida, 69 o 66? las biografías no se ponen de acuerdo, pero que bien por LEO, indudablemente es de los cantantes y artistas que nos han transmitido hermosos valores en sus letras y música como JESUS ES MI PASTOR, A LA SOMBRA DE MI MAMA, TE PIDO QUE ME GUIES, QUE HERMOSA NOCHE...Y otras tantas canciones con mensaje cristiano que no son comercializadas...Dios te bendiga LEO DAN!
SI…quién de nosotros hoy que frisamos los 40 o 50 años, no se le alborota la nostalgia al escuchar una de sus canciones, que nos transporta a la época de pantalón corto, de primeros amores, cuando amenizaba nuestras labores en casa, los juegos de mano, de mesa, el sabor de constantes trasteos, de paseos al campo, de compartir inolvidable en familia y entrañable alrededor de una copa de vino, una cerveza o un vaso de agua…La radio tocaba, toca y tocara por mucho tiempo su canción…FELIZ DÍA LEO DAN!
“Jesús es mi pastor nada me faltara,
Todo por el amor, que Él me tiene y me da…”
Inspirado en el salmo 23, y después de haber participado en un retiro de tres días con los cursillos de cristiandad (1965, cuando tenía 23 o 20 años), Leopoldo Dante decidió dedicar su vida a Jesucristo, al Padre Dios y al anuncio de la Buena Nueva. Aunque en un principio sonó o quería ser veterinario, después de graduarse de bachiller agrónomo (cual egresado del Colegio Agropecuario Santa Elena de Marquetalia, je,je ), terminó metido en el mundo de la música.
Cuando Leopoldo Dante Tevez, formó a los trece años su conjunto folklórico, allí en aquel su pueblo Atamisqui, árida tierra de Santiago, no se daba cuenta que estaba comenzando a construir a LEO DAN.
En sus comienzos Leo, formó un conjunto folklórico con sus amigos de su misma edad. Tenía entonces 13 años, durante dos años se presentaron en radios y peñas de Santiago de Estero y Tucumán con verdadero éxito, pero el grupo finalmente se disolvió porque sus componentes perdieron entusiasmo por las zambas y las chacareras. Un ritmo comienza entonces a hacer vibrar a la juventud. Un ritmo que irrumpe en las ciudades y llega a los pueblos más alejados.
Es el año de 1960 y Leo se siente irresistiblemente atraído por una música vibrante y joven. Compuso en esa época su primera canción que se llamó " Dulce Cristina", inspirado por una vecinita de su pueblo. Desde entonces todas sus composiciones, que en su mayoría llevan nombre de mujer, fueron inspiradas por un afecto, un sentimiento, el reconocimiento de una amistad, muy querida. Ingresa en una Orquesta, "Las estrellas americanas del Jazz"; pero su paso por allí fue breve porque limitaba su inquietud artística, le impedía manifestarse libremente. Dejó la orquesta y con otros muchachos de su edad integró un conjunto para tocar rock y twist, que se llamó "Los Demonios". Allí dió rienda suelta a su imaginación.
Sus canciones suaves, tiernas, se destacan por la sencillez del estilo y la originalidad de los temas. Su poesía es suave y espontáneamente juvenil. Graba su primer disco como solista en Columbia Records, Argentina, con dos composiciones originales suyas "Celia" y "Siento que te amo". Este primer simple marcó un punto de partida hacia la fama. "Celia" ocupó el primer puesto de venta y miles de copias se vendieron en el extranjero (américa Latina y España especialmente).
Sus canciones se popularizaron en toda América y el número de admiradores incontables, llegando los entusiasmos de sus "fans" a protagonizar hechos de los que se hicieron eco los diarios en eses entonces en todo el país, como su visita en Córdoba, donde hubo que intervenir la policía con gases lacrimógenos y mangueras, no obstante lo cual se organizaron nutridas manifestaciones que llevaron en andas a Leo por toda la ciudad.
Leo Dan, con sus dieciocho años se convirtió en la figura principal de uno de los programas musicales de mayor éxito en el video argentino y sus canciones empezaron a escucharse todos los días a través de la radio y televisión, entonándola toda la juventud “nuevaolera”.
La prensa lo calificó en aquel, como un muchacho sencillo, apacible como su tierra santigueña. Decían también verlo por las mañanas en las afueras de la ciudad, acompañado de su hermano o un amigo recorriendo los espacios verdes que rodean la ciudad, comiendo en los bodegones de Buenos Aires con su aire de muchachito indolente, asequible al reclamo de sus admiradores.
La televisión popularizó su figura, sus discos se difundieron por todas las latitudes del país y más allá de sus fronteras sus canciones. Fue entonces el astro máximo de la nueva ola en la Argentina y América.
Leo Dan también se destacó como actor en el cine, en las películas "SANTIAGO QUERIDO", " COMO TE EXTRAÑO MI AMOR", "LA NOVELA DE UN JOVEN POBRE" y "LA MUCHACHADA ABORDO" . Así mismo se le presentaron contratos ventajosos en toda América y el exterior, por lo que tuvo que despedirse del público argentino para radicarse en España, el gran público que lo hizo su ídolo, sintió tal vez más nostalgia en esa despedida, que las que se agolpaban en el sencillo muchacho de provincia , que un día desde Atamisqui, salió con su guitarra y su deseo de cantar.
El suceso en España, y su triunfo como autor en el festival de la canción en México, con su tema "CON LOS BRAZOS CRUZADOS" , incidió para que se presentara con ventajosos contratos en tierra azteca. Y otra vez su especial magnetismo logra que muy poco tiempo el público mejicano se refiera a él como "nuestro" Leo Dan. México lo había adoptado , sus canciones se mantuvieron en primer puesto de ventas suceso éste que se repite en todas las capitales de América. Su canción " TE HE PROMETIDO " inicia la seria de éxitos ininterrumpidos que llevo a una importante revista discográfica a titularle " LEOMANIA DE AMERICA " al fenómeno .
Cuenta Leo, que a la edad de doce años aproximadamente , despertó en él, la música Mexicana, sus ídolos para ese entonces eran Jorge Negrete, Miguel Aceves Mejía y otros. Motivándole así, el deseo de grabar con Mariachis en el momento adecuado. En 1975 aparece el disco titulado " MI ULTIMA SERRENATA " primer álbum al estilo ranchero, con temas como " ESA PARED " y "QUE DIOS TE ALEJE DE MI" que rápidamente llegaron hacer un exito total, comenzando de esta manera a realizar sus nuevas giras en toda las ciudades de México y parte de América.
Leo Dan, nacido un 22 de Marzo de 1942, actualmente se ha convertido en un misionero del evangelio (no evangélico, entendido como protestante), está dedicado al canto de himnos religiosos al Señor, llevando un mensaje a todo el que lo necesita. Con sus 80 kilos de peso, con su buen humor y la misma sencillez y carisma como cuando fue el ídolo “nuevaolero “ de la generación del 60 y que inclusive alcanzó los 70, ha seguido realizando diferentes producciones discográficas, con canciones al estilo de antes, combinadas con letras evangélicas con técnica moderna. Entre ellas sobresalen los temas " FUE UNA NOCHE DE VERANO " "PIDEME LA LUNA" y otros.
El tiempo a transcurrido el astro argentino afirma no sentirse viejo y menos acabado, su esencia de hombre de pueblo y cantautor de melodías de amor seguirá latente por siempre.
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"Comencé a predicar la Palabra, en los lugares donde Dios me mandó, que son las discotecas, donde la gente va a lanzarse sus traguitos", expresó el artista
En una entrevista al NUEVO DIARIO de Managua Leo compartió parte de su testimonio, -el tema que más le apasiona, porque ahí se le va toda su vida–, “soy cristiano, y es el mérito más lindo que puedo tener, y quisiera contagiar a todos y que conozcan a Jesucristo y lo acepten”.
¿“Jesús es mi pastor” marca su vida?
Cuando yo triunfé estaba muy feliz porque ganaba mucho dinero y pensaba que eso era lo más hermoso que me había ocurrido, en mis comienzos precisamente. En 1965-66, fui llamado a un cursillo de cristiandad. Ahí conocí la gracia del Señor. Me acuerdo que yo me negué luego porque ese cursillo era viernes, sábado y domingo. Y dije: no, yo no puedo ir, porque son los días que más produzco.
El Señor después me tuvo dos años sin trabajar, me llevó a España con lo justo, y a veces había que juntar las moneditas para poder comer, pero Él me desarmó y me volvió a armar. Y bueno, desde ese día el Señor ha estado siempre con nosotros, ha fortalecido mi matrimonio.
“Yo quisiera contagiar a la gente, para que acepte a Jesús como su Salvador, porque el Señor no descuida a sus hijos. Así estés en el barro, el Señor te va a levantar, así estés en las perdiciones, el Señor te va a rescatar. Así estés en la cárcel, el Señor te va a levantar, y si estás enfermo siempre vas a ser un ejemplo porque trabajas para Dios”.
Por lo general se piensa que los que aceptan a Jesucristo como su Salvador personal son personas que han fracasado en la vida, les ha ido mal, o están en un hospital con una grave enfermedad, o bien en situación de extrema angustia, sin embargo, tengo delante de mí a un hombre lleno de fama, nombre, prestigio, que buscó a Jesús
Explíquenos, ¿cómo fue esto?
Es muy fácil. Yo pensaba que yo lo tenía todo; materialmente tenía éxito, fama, juventud, pero llegaba un momento en que uno está solo y nadie te puede llenar esa soledad sino Jesucristo. Ahora, que seguir a Cristo no es fácil; significa sacrificio, significa muchas cosas, aceptar la cruz y cargarla. Yo me maravillo porque, por ejemplo, no es que queremos un hotel de primera, y la gente nos da un hotel de primera.
Llegamos a un lado, digo yo soy Leo Dan, y como que la gente responde a algo y todo eso es obra de Dios, porque Dios a sus hijos los quiere como cualquier padre. Creo que nuestro Padre es bondadoso en ese sentido y quiere que nosotros nos sintamos favorecidos de Dios, porque la religiosidad es la actitud de aquellos que sólo dan vuelta a la cruz, pero Cristo nos invita a tomar la cruz, y aceptar a Cristo y seguirlo es ayudar a los demás, al prójimo, sentirse útil.
Queda claro que usted no pasó ninguna crisis, que nadie buscaba sus discos y la disquera no quería nada con usted .
Al contrario, cuando no quise aceptar el llamado, el Señor me pegó un golpecito, un jalón de oreja de dos años.
Ser popular y ser cristiano en un mundo sofisticado, de mucho ego, galán buscado por las muchachas… ¿cómo manejó estas situaciones?
Al principio era el ego, como dices, que yo era el ganador, y lo interesante y maravilloso que a mí me sucedió es que todas aquellas muchachas bonitas que venían a mí, venían a pedirme consejos. O sea que venían a decir que el novio, que esto, que papá. En vez de ser un galán me convertí en un consejero, y parece que era bueno porque muchas se casaron, muchas que no podían tener hijos, hoy los tienen por orar, por creer en la Palabra. El Señor lo solucionó de la forma más linda, con la verdad, con la justicia.
Quiso sólo hacerle canciones a Jesús Leo quiso abandonar todas las canciones de corte popular, pero confiesa que “hace siete u ocho años, cuando empecé a predicar la Palabra recibí un mensaje en Ecuador. Era del Señor Jesucristo a través de una profetiza: “Tú eres uno de mis elegidos, utiliza tus canciones para conquistar almas para el Señor”.
“De ahí comencé a predicar la Palabra, en los lugares donde Dios me mandó, que son las discotecas, donde la gente va a lanzarse sus traguitos, que no es malo, lo malo es cuando se abusa”.
¿Qué le ha dado esa relación de usted con Jesucristo?
Todo, lo máximo. Lo más hermoso que me ha pasado en la vida es haber conocido a Jesucristo y haberlo aceptado como mi Salvador.
Para naciones pobres como Nicaragua, el Salvador y otras tantas que conoce ¿cuál sería su mensaje?
La gente es pobre vive en miseria porque no acepta a Jesucristo como su Salvador. La gente cree que (Dios) le va a solucionar los problemas en el sentido como ellos lo ven. Pero hay que tener conocimiento de la Palabra. Mira a los pastores, a la gente que predica la Palabra, que están con Dios y trabajan para Dios: no les falta nada, es más, lo único sí que los pone tristes es cuando ven que la gente llega a la iglesia por estar enamorada del pastor o lo perciben como algo mágico. No, así no, hay que ir a escuchar la Palabra y aplicarla...
A veces la gente cree que porque tiene un hotel, una empresa, un vehículo, dice: mira Dios como ha sido conmigo. No, no es así. La felicidad es otra: la felicidad es que tus hijos no se enfermen, que tengan para comer, que se puedan educar. La felicidad es que te sientas bien sano, que puedas dormir sin decir: ¡Uy!, le debo a éste, y tengo que estar huyendo, que esto y lo otro. Por eso digo, si tú tienes conocimiento de Dios, difícil es que vayas a perecer. La Palabra dice: mi pueblo perece por falta de conocimiento.
Así que si estamos pobres, enfermos, en la miseria es por falta de conocimiento, porque quien conoce a Jesucristo, una nueva criatura es, y todos tus pecados te son perdonados. Leo recita el texto bíblico: Jeremías 33: 3 “Clama a mí que yo te responderé y te enseñaré cosas grandes que tú no conoces”.
Leo Dan ¿le ora a Santo Domingo y San Sebastián para que lo oiga Dios?
Mi relación es directamente con Dios, a través de Jesucristo. Predico a Cristo como el único Camino, la única Verdad y en quien reside la Vida, y que nadie viene al Padre sino es por intermedio de Él. Pero debemos amar a nuestros hermanos, como hijos de un solo Dios, y tenemos que contagiarlos con Jesucristo, porque no hay otra forma de llegar a Dios.
San Sebastián y otros santos son un ejemplo de mártires que han dedicado su vida al Señor, pero ellos han sido como nosotros, de carne y hueso. Para llegar a Dios no hay otro camino, tú lo puedes buscar por donde sea: ni siquiera haciendo buenas obras, porque Dios no se glorifica por sus obras, el justo por la fe vivirá. Por eso no me avergüenzo del Evangelio, porque es Poder de Dios para aquel que cree, dice Romanos 1: 16-17. Es más, Cristo fue el primer educador que mandó Dios: nos enseñó la regla del amor: perdonar al enemigo.
¿Le gustaría repetir todos esos años de su vida?
Sí, pero para mejorarla. Yo he cometido muchos errores, muchas cosas. Yo pienso que podría mejorar más si Dios me da otra oportunidad. Pero como dice II de Corintios 5: 17 “El que conoce a Jesucristo, una nueva criatura es y todo los pecados le son perdonados”.
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Leo Dan: La mujer es la musa de mi inspiración
Temas como "Te he prometido", "Pareces una nena", "Mary es mi amor" y "Toquen mariachis canten", entre muchas otras, marcaron una época en la música romántica
Por Nancy Moncada Pineda
Con un buen sentido del humor, alegría, sencillez, cordialidad y un especial sentido de espiritualidad, Leo Dan habla a LA PRENSA sobre sus gustos, proyectos y esperanzas.
El carisma que lo caracterizó en su época de ídolo juvenil de la generación de los años sesenta e incluso de los setenta, lo ha llevado actualmente a seguir realizando producciones con canciones del mismo estilo romántico que lo hizo famoso combinadas con letras evangelizadoras.
El artista es muy conocido por sus románticas canciones con nombre de mujer como "Celia", "Estelita", "Fanny", "Marissa", "Pero Raquel" y "Mary es mi amor", que dedicó a su esposa quien reside en Miami.
La mujer ha sido siempre la musa que inspira a Leo Dan. En la entrevista afirmó que las composiciones que lo hicieron famoso surgieron de su admiración a ese ser creado por Dios.
Aunque manifestó que todas sus canciones son sus preferidas porque son sus hijas, el cantante y compositor reveló un especial cariño a "Mary es mi amor".
Conversión. Una de las cosas que el artista afirma y repite es el aspecto de su conversión, la importancia de ese evento en su vida. El artista recalcó que gracias a personas de movimientos como Cursillos de Cristiandad, él supo ver el verdadero significado de Jesús en la vida del hombre.
El paso de los años no ha sido en vano. La conversión del artista lo ha hecho componer otro tipo de canciones con otros significados, aunque el romanticismo en él sigue vigente, ahora escribe letras más reflexivas y gusta de la música contemporánea y folclórica, tanto mexicana como argentina.
Entre las más recientes canciones que ha promocionado, Leo Dan recordó "Vuela alto", "Pídeme la luna" y "Hay amores que lastiman".
Para las personas que creyeron que el cantante estuvo retirado, él aseguró que siempre ha estado componiendo y cantando. Tiene un sello productor y le está produciendo a grupos mexicanos y de su tierra natal, en distintos géneros.
Gustos. Entre sus actividades favoritas se encuentra viajar. "Es como una enfermedad. Tengo que viajar todos los días porque sino no me siento bien", aseguró.
Para él no hay un lugar en especial donde vivir, aunque está radicado en Miami explicó que cuando habla con su esposa llegan a la conclusión de que les gustaría "vivir en el camino".
En el aspecto gastronómico lo que le encanta es la carne.
Según palabras de Leo Dan, influyeron en su música artistas como Elvis Presley, Paul Anka, Neil Sedaka y Enrique Guzmán, y otro elemento: "la necesidad". A lo largo de su carrera artística, el exponente de las baladas románticas ha compartido el escenario con Vicente Fernández, Leonardo Fabio, César Costa, Enrique Guzmán, Olga Guillot, Palito Ortega, Julio Iglesias, Roberto Carlos y Agosto Catedral.
Recordó con emoción cuando, hace nueve años, se presentó en un concierto con artistas de los noventa como Alejandra Guzmán, Ricky Martin y Cristian Castro. "Estaba promocionando mi canción ‘Pídeme la luna’ y cuando aparecí en el escenario la gente me aplaudió sin cesar, por aproximadamente cinco minutos".
Con orgullo, Leo Dan dijo que él fue el primer baladista que grabó con mariachis cuando eso no era concebido. "Antes el baladista era baladista y los mariachis eran aparte”, explicó el amante de las rancheras. El disco titulado "Mi última serenata” apareció en 1975 e incluyó los temas "Esa pared" y "Que Dios te aleje de mí".
Faceta. Otra de las facetas de Leo Dan fue su experiencia como político. Por tres años, durante el segundo período de Carlos Menem, fue precandidato a la gobernación de su provincia.
Aunque no ocupó el cargo, siempre analiza y habla de los problemas de su país, que ahora se encuentra sumido en una terrible crisis.
Él cree que el pueblo argentino estaba viviendo una mentira y que "lo peor que un gobierno puede hacer es mentir".
Entre sus proyectos más próximos está el de montar un programa de televisión en México para difundir el talento y la música de los países latinoamericanos.
Leo Dan: “Lo más hermoso que me ha pasado en la vida es haber conocido a Jesucristo”
Eso es Joseph Barbera, un hombre que si viviera todavía hoy celebraría sus 100 años.
