Muchas cosas sobre la nariz o apéndice nasal aún se me quedaron entre el tintero después del final de mi primer artículo dedicado al órgano ( ñato, aguileño o respingado , eso depende del portador) de la respiración...
Por ejemplo comenzaré con los olores que más valora, ama o aprecia cada uno de nosotros...Yo les propongo un ejercicio práctico con lápiz y papel, donde van a escribir en el encabezamiento: Estas cosas he olido: (10) que con seguridad les va remitir preferencialmente a a sus tiempos de infancia, de pantalón y faldas cortos y de travesuras. Por ejemplo y yo comienzo citando 6 de los que espontáneamente me acuerdo:
El olor de pesebre en las navidades de la infancia (donde se mezclaba el olor del papel musgo con la fragancia de las palmas de monte , que en Caldas llamábamos “palmichas” , el aserrín fresco de madera que llenaba la cunita del Niño Dios, y se unía el olor a nuevo del plástico, cartón y hule de los juguetes (patitos, caballos, casitas etc)...En fin era un concierto de los olores de la naturaleza con los olores que emanaban de lo artificial...
Las fragancias que salían de la cocina del hogar, las viandas y deliciosas comidas preparadas por mamá y la abuela: el olor a cebolla de rama, el maíz y el arroz en herbor, la colada de harina de trigo, etc).
El olor a nuevo de los utiles escolares y sobre todo de la cartilla Nacho o Coquito con la que aprendimos a leer, los más viejos evocarán el olor que emanaba de la cartilla “Alegría de leer”, que nos acompañaba en las horas de tedio y la cual hojeábamos justo antes de acostarnos y nos motivaba en verdad , despertándonos las ganas de aprender a leer para disfrutar los cuentos, poesias y adivinanzas que en un principio era lo único que nos interesaba!
El olor a pan caliente que salía de la unica panadería de nuestra calle del pueblo, donde a veces nos sorprendía también el agradable aroma de la panela refinada confeccionando la cuca, las fluctuaciones del queso costeño que se utilizaba para amasar y armar los deliciosos buñuelos, los exquisitos pandebonos, los gustosos pandequesos en forma de arandela...
El perfume natural de nuestros seres queridos al abrazarlos y besarlos , haciendonos concluir, sólo con el paso de los años y cuando ya se han ido que cada quien tenía una fragancia especial, única y particular.
La loción o perfume artificial de nuestro ser amado , con quien ensayamos superar el amor agape, para dar el paso al amor eros...Muy diferente al “pacholi”, con el cual algunos se burlaban al referirse al perfume del enamorado...
Después , es interesante conocer un poco sobre la etimología y la traducción en algunas lenguas de la palabra NARIZ. Un profesor malo de inglés, como yo lo fuí, pero no fui yo el de la anécdota, preguntó a un alumno en su evaluación oral como se decía nariz en gringo, a lo que el alumno maqueta respondió espontáneamente NO SE! Muy bien! dijo el maestro, tiene 10!..No sabía que la pronunciación correcta era “nouz” o algo cercano...
En francés los galos escriben NEZ, pero no pronuncian la última letra, asi ellos “parlan” de NE, di ne, le NEZ, y lo simpático además es que en francés este órgano es masculino y es muy usual que en el principio del aprendizaje de la lengua uno se equivoque muy seguido tratando le NEZ francés como una fémina , dándole el artículo de las féminas.
En lengua mafa se dice HUTSAN y ahí si es más facil porque ellos no tienen esos problemas de partículas que señalen género masculino o femenino. Simplemente se habla de la nariz de sutano o fulana y de sus cualidades, color, tamaño, etc.
Hay dichos populares que incluyen la nariz como referente de sabiduría , valores, cultura o buen vivir: Veamos,
En español para decirle a alguien que no se inmiscuya en asuntos que no le conciernen o no le tocan le decimos “No meta sus narices donde no le importa” o peor aún “no meta el hocico aquí...” Es curioso esto porque en inglés tambien está esta expresión sinónima: Keep your nose out of my business”, que quiere decir “ Ocúpese! O No se meta en mis asuntos”.
“Cerrar la puerta en sus narices”, “burlarse de alguien en sus propias narices”, es decir muy cerca , la nariz así en nuestra lengua y en el contexto de algunos países es referente de excesiva acercanía o aproximación. “Dejar a alguien con un palmo de narices” , con todos los preparativos, con los crespos hechos, con un gran trabajo realizado para nada...
También es usual la expresión en español “ganar por una nariz”, es decir ganar por una pequena o nimia ventaja”... Aunque mi nariz es grande , quede claro, nunca gané una carrera gracias a mi nariz, ja,ja,ja.
Recuerdo que en un tiempo cuando todavía no había oído hablar de Sigmund Freud y el Psicoanálisis y todos esos “intrinculis” de los mecanismos de defensa, obsesiones y demás psicologismos, que quieren al final demostrarte que eres un pervertido sexual sin remedio, me encontré nariz a nariz con un cuadro inspirado en el pensamiento del gran pensador de origen judío: fue en un bar llamado “sinfonía”, en mi pueblo, y el mostraba en un diseño o esbozo muy simple, el rostro de un hombre viejo de perfil , sobre el que después de cierto rato de observación se descubría una escultural mujer desnuda, y la figura femenina empezaba en la frente que formaba su cara , los ojos del hombre delineaban casi perfectamente sus senos y la nariz hacía como de esculturales piernas que cubrián en parte también su aparente y escultural cuerpo haciendo un triángulo sensual que invitaba a...contemplar y en verdad decirse que la sensualidad mueve al mundo. No puedo negar que esa nariz en aquel cuadro me impactó y mucho más después de leer bajo esa cabeza, ese rostro artístico del hombre viejo que representaba el pensamiento humano lo siguiente: “Lo que el hombre tiene en mente”...
Ahora, creo que ha sido una injusticia con nosotros los narizones relacionar el tamaño desconsiderado de la nariz con la mentira! Como algunos hemos sido muy mentirosos se nos ha crecido la nariz...Eso no es cierto! Es que todos lo ñatos son sinceros y dicen la verdad? Todo esto nació en la mente del “italianísimo bambino” Carlo Collodi o Lorenzini que se le ocurrió crear a Pinocho (ustedes conocen bien la historia no?) , lindo cuento por cierto, solo si fuera por el detalle de la nariz, br, br,hurr...
La nariz es como los colores y los gustos, que entre ellos dicen, no hay disgustos...Muchas personas les gustan las narices aguileñas, otros prefieran las ñatas, otros las respingadas o las largas...
El pueblo de cultura Mafa de acá del Camerún , entre el cual vivo hace 4 años, posee en su mayor parte la nariz chata o ñata, tirando a apachurrada o “esponjada”...Esas narices, forman un conjunto agradable con los ojos, los labios y la orejas sobre todo de las mujeres...Para consolarnos nosotros los feos, de nariz “desmesurada” les diré que no hemos de preocuparnos por el aparente “ defecto” de nuestra nariz, pues la nariz que el Creador nos ha dado va de acuerdo al resto de nuestros órganos faciales y todo ello forma un conjunto armónico y bien dispuesto...Es decir nuestro apéndice nasal está de acuerdo a la medida de nuestra frente, la dimensión de nuestros ojos, la extensión de nuestra faz u rostro que llaman y el tamaño de nuestras antenas auditivas 5 (léase orejas)...Aunque no faltara el amigo e imprudente observador detallista que remarcará no ver ninguna armonía en nuestra cara, ja,ja,ja ... Queridos colegas, no queda más que aceptarnos y querernos con los rasgos que Dios en su infinita Misericordia , repito, ha dispuesto para nosotros...
Para terminar , este chistecito muy inclusive:
Después de salir de la escuela, un niño se acerca super angustiado a su mamá y le pregunta: “Verdad mamá que yo soy muy narizón ? No mijito, eso no es cierto, pero tenga cuidado y no vuelva enmocar sus cuadernos ni los de los otros niños, ni el tablero , ni los libros, ni la libreta de calificaciones del profesor ...Y quítese de ahi que me rompe las cortinas!
Continuaremos esta serie de articulos con la reflexión sobre los ojos!
Hasta pronto!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por haber visitado mi blog, espero tus comentarios, reacciones y que continúes brindándome ideas y sugerencias para mejorarlo.
Gustavo Quiceno