jueves, 14 de agosto de 2008

Semblanza de mi hermano, pastor y maestro P.Jaime Ossa. mxy


Su hablar pausado, un jocoso estilo para decir las cosas así como su increíble sencillez, y su pelo cano y nariz enorme, serán difíciles de olvidar…
Escuché su voz por teléfono antes de encontrármelo en persona. Corría el año 1999 y yo había ya decidido retornar al seminario de Misiones Extranjeras de Yarumal, después de un receso voluntario de cinco años por fuera, trabajando, estudiando y sirviendo a la Iglesia de otro modo. Ya había enviado mi carta de solicitud de reingreso y los miembros del Consejo general de la Congregación de aquel tiempo debían dialogar y decidir sobre mi petición. Una de mis estrategias fue llamar a los padres que lo integraban y que conocía, entre ellos al Padre Edgar (superior en esos días), también hablé con el Padre Bedoya y aún sin conocerlo ni nunca habérmelo encontrado dialogué un buen rato por el aparato con el Padre Jaime Ossa Toro, quien era el secretario del egregio comité coordinador. Recuerdo, esa vez me dijo que mismo sino me conocía, por lo que había escuchado de mí y por la carta que habían leído en el Consejo, contara con su apoyo y voto para reingresar a los Misioneros de Yarumal.
Después ya lo ví en persona, frente a frente en el Semisiones ubicado en el barrio Calasanz en el año 1999. El era el rector el pasado año y ahora ejercía como secretario más dedicado y padre coordinador de la escuela de teología Gerardo Valencia y en algunas horas prestaba su colaboración como docente en el semillero de seminaristas , impartiendo clases de griego clásico a los filósofos y compartiendo con los estudiantes de teología su experiencia misionera en Angola donde estuvo doce años.
Por lo que supimos desde 1982 hasta 1994 trabajó en Angola, en territorio kimbundo en total 12 años, donde vivió experiencias muy duras por el conflicto civil africano, uno de los más largo de la guerra fría (1972-2002).
Durante esos años entre 1999 y 2002 hasta que dejé el país y partí para Bélgica y después para Camerún , reconocí en el padre Jaime Ossa un hombre demasiado sencillo, conversador, acogedor , secretario eficiente que redactaba sus notas, informes y actas del Consejo y artículos noticiosos con amenidad y suspicacia.
Fumador empedernido, amante del tinto al compartir con él daba la impresión de ser un hombre imperturbable o que poco se inmutaba por las dificultades o poner cara de sorpresa al enterarse de hechos nefastos. . Al contrario, era un hombre sumamente sensible, bueno, con don de escucha como buen sacerdote, generoso y jovial, expresando quizás de una manera “sui generis” su esperanza y fe en la vida y en la Providencia.
Era de los pocos hombres que he visto en mi vida que tienen la capacidad para reírse de sí mismo. Alguna vez en clase de “telogía negra” nos contó como unos niños en Angola lo miraban y mofándose gritaban una palabra desconocida para él en el momento, pero después nos decía riéndose al contárnoslo que lo que los niños le gritaban era “narizon, narizón”.
Así era nuestro hermano el Padre Jaime Ossa: por eso alguno de nuestros compañeros comenzaría a llamarlo “padre Jaime goza” para hacer alusión a ese modo de enfrentar la vida sin muchas complicaciones y arandelas y por esa capacidad de reírse de sí mismo y hacer reír a los otros quienes le escuchaban.
Sus homilías y clases también eran así simples, pero interesantes, a la vez muy profundas y catequizadoras.
La última vez que lo visité fue a finales de abril de este año. Lo encontré demasiado solo en la Parroquia, no se si por propia voluntad o negligencia de los superiores. Emaús, la parroquia ubicada frente a nuestro seminario emblema, es de las parroquias más grandes de Medellín, constituida por dos mundos o esferas bien definidas pero a la vez muy complejas. En la parte de arriba están los barrios del “Pesebre y Blanquizal”, con pasados funestos de excesiva pobreza y delincuencia y donde aún hoy se ven muchas secuelas de ello. Abajo los barrios poblados en su mayor parte de gente estrato 4, 5 y 6, en los barrios “Calasanz”, “Los Colores” , “La soledad” y “El Jardín”. Y trabajar o realizar una acción pastoral de integración , tolerancia y aceptación entre dos mundos tan aparentemente dispares, no es cosa fácil.
El Padre estaba trabajando bastante por los más marginados y pobres de su comunidad parroquial . La limosna que le daban para ayudarles, la repartía espontáneamente a quien llegaba a las puertas de casa a pedir (desplazados, desempleados, madres solteras cabeza de familia, etc) al igual que estaba desarrollando una pastoral muy enfocada hacia los niños y jóvenes. Supe que en la casa cural estaba adecuando salones e instalaciones para presentarles cine didáctico , reforzar algunas clases y así hacerles la vida más fácil y feliz a la gente menuda.
Y qué ironía al parecer fue uno de esos beneficiarios , un menor de edad que ha sido el causante de su muerte.
Hoy cuando en Colombia se celebra “El día del humorista” y el noveno aniversario del asesinato de ese genio entrañable e inolvidable del humor como lo fue el periodista y docente Jaime Garzón , es paradójico y terrible coincidencia que sucediera la muerte del Padre Jaime…En realidad ha sido un mal chiste en este día.
Guardaré siempre los mejores momentos vividos al lado de mi hermano que en la Gloria de Dios esté.
Jaime ahora estás riendo junto al Padre tierno y bondadoso y como ha dicho hoy nuestro órgano informativo Sitio de Encuentro pero hablándote a ti , te digo : Que Dios quien te llamó a la vida, al sacerdocio y te dotó del carisma del servicio, te tenga gozando en su presencia.


P. GUSTAVO QUICENO JARAMILLO. mxy



OTRAS NOTAS SOBRE EL ASESINATO DEL PADRE JAIME OSSA TORO.mxy

Un adolescente habría asesinado a sacerdote en Medellín

Caracol | Agosto 13 de 2008

A disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar en Medellín quedó un adolescente de 16 años, indiciado por el asesinato de un sacerdote de 70 años, integrante de la comunidad de Misioneros de Yarumal, cometido en la Parroquia Emaús, en el Barrio Calazans, al occidente de esta ciudad.

El presbítero Jaime Ossa Toro, de 70 años de edad, fue muerto con arma blanca y hallado en su habitación de esa parroquia.

Dos testigos, también menores de edad, entregaron información a la Policía y la Fiscalía y precisaron que hasta la medianoche estuvo en ese lugar un adolescente conocido del sacerdote, por lo que de inmediato practicaron un allanamiento a su vivienda y le abrieron un proceso judicial, a la luz el sistema penal acusatorio y de la ley de menores de edad.

El Comandante de la Policía metropolitana de Medellín, General Dagoberto García Cáceres, explicó que el adolescente quedó bajo custodia del Bienestar Familiar mientras se surten los procedimientos jurídicos, para legalizar la detención y conocer las pruebas relacionadas con el crimen.

El sacerdote de los Misioneros de Yarumal, había adelantado trabajos especiales de esta comunidad en África y según la comunidad se caracterizaba por su trabajo con los jóvenes y su entrega a los feligreses.

El presbítero Ossa Toro nació en Medellín el 28 de noviembre de 1937, desde los doce años pertenecía a la Comunidad Misioneros de Yarumal y realizó su primera promesa perpetua el 3 de diciembre del año 1961.

Se había ordenado sacerdote en octubre del año 1962; fue párroco en Puerto Merizalde, Valle del Cauca, el primer misionero de Yarumal en llegar a Angola, África Occidental, y desde 1995 estuvo en esta ciudad inicialmente como miembro del Consejo General del Instituto de Misiones Extranjeras de Yarumal y luego como párroco de la Iglesia de Emaús hace tres años.

Los feligreses aseguran que el religioso promovió la participación de los laicos y los jóvenes en las diferentes actividades misioneras.

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Asesinan a sacerdote de 79 años en casa cural de Medellín

El religioso prestaba sus servicios en la iglesia de Emaús desde hace tres años.
A puñaladas fue ultimado el padre Jaime Ossa Toro en una habitación de la parroquia Emaús, en el occidente de la ciudad. El presunto homicida, un joven de 16 años, cayó en manos de las autoridades horas después de ocurrido el crimen.
El cuerpo sin vida del religioso presentaba varias heridas de arma blanca, reveló el general Dagoberto García, comandante de la Policía en Medellín.

“La Brigada de Investigación de Homicidios se encuentra al frente del caso y ya tenemos un joven indiciado que, según la información, estuvo hasta las 12 de la noche con el sacerdote en su residencia”, comentó el alto oficial.

En el tradicional barrio Calasanz, donde Ossa Toro prestaba sus servicios, la comunidad está consternada. Nadie se explica por qué le quitaron la vida al sacerdote.

“En este momento, su feligresía está triste de ver que un gran pastor de la Iglesia católica, una persona tan buena y tan entregada, se ha ido de esta manera”, comentó José Antonio Cano, habitante del sector.

Los amigos personales de la víctima también se pronunciaron. El padre Óscar Osorio destacó la excelente relación que los feligreses tenían con Ossa Toro, quien dedicó toda su vida al sacerdocio.

“La gente está impresionadísima y eso que no llevaba sino tres años acá (…) fue un párroco querido, respetado en la parroquia”, precisó Osorio.

El presunto homicida y dos testigos son indagados a esta hora por funcionarios de la Fiscalía.

Medellín (Antioquia)

Canal Caracol



14 de agosto de 2008
Lamentamos infomar con mucha tristeza, la muerte del padre JAIME OSSA TORO.

El padre Jaime fu encontrado hoy (13 de agosto), sin vida en la parroquia de Emaús, donde ejercía como pàrroco. Todo parece indicar que fue asesinado por robarle.

Sabemos del aprecio que gozaba Jaime en el Instituto y de la tristeza que nos produce su desparacion en esa forma. Que Dios que lo llamó a la vida, al sacerdocio y lo dotó del carisma del servicio, lo tenga gozando en su presencia.

Fraternal saludo,
Sitio de Encuentro
Misioneros de Yarumal


Indignación y pesar en Calasanz por asesinato de su párroco



Gustavo Ospina - Medellín | Publicado el 13 de agosto de 2008



Muy dolida se encuentra la comunidad del barrio Calasanz son el asesinato, esta madrugada, del sacerdote Jaime Ossa Toro, de 70 años, quien fue hallado muerto en el comedor de la casa cural de la parroquia de Emaús, donde prestaba sus servicios desde hace cerca de tres años.
El religioso fue asesinado con arma blanca. El crimen no ha sido atribuido por las autoridades a ninguna persona o grupo de personas y lo único que trascendió es que el religioso recibió cuatro puñaladas en partes vitales de su cuerpo.
Ossa Toro, en el tiempo que estuvo en la parroquia, ubicada en la carrera 81 con calle 53, alcanzó a ser querido y respetado por toda la comunidad, que de inmediato se hizo presente en el sitio para, de alguna manera, hacer sentir su rechazo al crimen. "Fue un padre muy formal, muy querido, sus misas eran largas pero muy profundas y ayudaba mucho a los pobres", dijo Sonia Morales, vecina del sector.
La Brigada contra el Homicidio comenzó las pesquisas para dar con los autores. En el momento investigan a un joven menor de edad.
Tomado de El Colombiano
http://www.elcolombiano.com/BancoConocimiento/A/an_asesinatosacerdoteemaus_13082008/an_asesinatosacerdoteemaus_13082008.asp?CodSeccion=9


"Mataron un ser maravilloso"

EL CRIMEN A puñaladas del padre Jaime Ossa Toro, de la parroquia de Emaús, sacudió y dejó muy triste a la comunidad del barrio Calasanz.
Gustavo Ospina Zapata - Medellín | Publicado el 14 de agosto de 2008
Mucha tristeza, pero también mucho enojo, produjo en la comunidad de los barrios Calasanz y Ferrini el asesinato del padre Jaime Ossa Toro, de 70 años, en la madrugada de ayer.

A primera hora de la mañana, este sector, al occidente de Medellín, fue sorprendido con la presencia de patrullas de la Policía que llegaron hasta la iglesia Emaús, donde prestaba sus servicios el religioso.

Y de la sorpresa se pasó a la preocupación cuando los uniformados ingresaron a la casa cural y momentos después confirmaron la noticia: el padre Ossa había sido asesinado de cuatro puñaladas.

De inmediato, al sitio fueron llegando personas de la comunidad que querían sentar su voz de rechazo al crimen. "El que hizo eso no tiene perdón, seguro que fue una persona que él mismo padre ayudó", alcanzó a decir un ciudadano que no salía del asombro por el asesinato.

Y es que entre todos los presentes en el corrillo que se armó en las afueras de la parroquia mientras las autoridades realizaban el levantamiento del cadáver, sólo una palabra se repetía como en efecto dominó: "era un ser maravilloso".

El primero en decirlo fue el padre Óscar Osorio Jaramillo, de la misma comunidad misionera del padre Ossa Toro, quien destacó las cualidades de su amigo.

"Era un sacerdote muy estudioso, muy actualizado, me quedan muy buenos recuerdos de él, era muy fumador y en las últimas semanas venía muy enfermo, nosotros le estábamos colaborando con las misas", reveló el religioso, que pidió a la comunidad que se calmara y no hiciera mucha alarma con el suceso.

El brigadier general Dagoberto García Cáceres, comandante de la Policía Metropolitana, informó que hay un indiciado de 16 años como sospechoso del crimen. El caso fue asumido por la Brigada Antihomicidios.

Los niños
Entre las cosas que más destacó del padre la gente del sector estaban su amor por los niños y su espíritu de ayuda. "Me encantaban sus misas, eran larguitas, pero con mensaje, siempre lo vi ayudando a los pobres, quería mucho los niños", dijo Sonia Morales, quien tenía fotos del padre con su hija.

El padre Jaime, nacido el 28 de noviembre de 1937, había llegado allí hacía tres años, que fueron suficientes para hacerse querer de la comunidad. Recibió su formación en la Comunidad de Misioneros de Yarumal y en ella desempeñó cargos directivos. Su vocación lo llevó a ejercer en Buenaventura y en el país de Angola, entre 1982 y 1994.

Peter Gevera, un misionero que llegó de Kenia para trabajar al lado del padre Ossa, se quedó con la mejor impresión del sacerdote. "Llegué el sábado y todo mundo me habló maravillas de él, me pareció muy humano, un ser extraordinario", comentó Gevera en inglés.

Tal vez la nota más bella la pusieron Johan Espitia, John Arley Ríos y Aristides Casas, tres niños de once años que llegaron a las afueras de la iglesia a expresar su tristeza.

"Nosotros lo queríamos mucho, estábamos haciendo la catequesis con él... siempre le veíamos ayudar a gente que venía a pedirle cosas... nos aconsejaba muy bien", dijeron los pequeños con sus rostros muy tristes.

Opiniones
"Fue la persona más maravillosa, ayudaba a todo el mundo y tal vez abusaron un poquito de él porque era demasiado caritativo. Como jefe de la Pastoral de la Salud fue ideal, Lloré cuando recibí la noticia".
Lucy Montoya, de la Pastoral de la Salud

Antioquia bilingüe
Community mourns Father Ossa
Tuesday's murder of 70 year-old catholic priest, Jaime Ossa Toro, moved the people of Calasanz and Ferrini, neighborhoods in Medellín. According to authorities the priest, who served in the parish of Emaus on the west side of Medellín, was found stabbed to death in the dining room of his house. Police are conducting an investigation into the circumstances of the crime, and have as a suspect a 16 year-old boy who entered Father Ossa's residence on Tuesday evening. This community will always remember their priest as a noble, helpful person. "He was a wonderful man", was a phrase heard a few times outside the church today.

DOLOR POR ASESINATO EN MEDELLÍN DEL SACERDOTE JAIME OSSA TOROBogotá DC, 13 de agosto de 2008

El Arzobispo de Medellín, Monseñor Alberto Giraldo Jaramillo, sus Obispos Auxiliares y todo el Clero de la Arquidiócesis de Medellín expresaron su dolor por la muerte violenta del Sacerdote Jaime Ossa Toro, ocurrida en la madrugada del 13 de agosto en esa ciudad.

El hecho fue cometido “por personas que se desconocen y que en la actualidad son materia de investigación por parte de las autoridades competentes de la ciudad”, afirma un comunicado de la Arquidiócesis de Medellín.

El Sacerdote Ossa Toro, de 70 años de edad, se venía desempeñando como párroco del templo de Emaus en el sector de Calasanz, en Medellín, desde el 16 de enero de 2006.

“Como Iglesia católica rechazamos rotundamente esta clase de actos que van en contra de la vida humana, el mejoramiento de la sociedad y la profesión evangelizadora de un Sacerdote que diariamente anuncia la Palabra de Dios”, afirma el comunicado de Mons. Alberto Giraldo Jaramillo, Arzobispo de Medellín.

“No tenemos palabras para expresar nuestra preocupación y pena por el asesinato de nuestro querido Presbítero. Hacemos un llamamiento a la oración por el eterno descanso del Padre JAIME OSSA TORO y por los responsables de este magnicidio para que el Señor Jesús transforme sus corazones”, agrega.

El padre Ossa Toro fue misionero en la Costa Pacífica colombiana, vivió 14 años de misión en Angola y se desempeñó como asistente general de gobierno del Instituto de los Misioneros Javerianos de Yarumal, junto a Monseñor Edgar Tirado actual Obispo de Tierraadentro.

De acuerdo con la Arquidiócesis de Medellín, el sacerdote inmolado era apreciado por sus feligreses y se distinguía por su espíritu de caridad con los más necesitados, su entrega a la pastoral, su sencillez, inteligencia y cultura general. Sus exequias se realizarán en la Parroquia Emaus el 14 de agosto, a las 10 de la mañana.

Autor: Dpto. de Comunicación Social
Correo-e: comunicacionsocial@cec.org.co

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Esta información fue publicada en este sitio web el (día/mes/año): 13/08/2008

A SOLO DIOS EL HONOR Y LA GLORIA

Amigas, amigos...

Con dolor, repudio y rechazo hemos recibido hoy la noticia del asesinato de nuestro hermano sacerdote Jaime Ossa Toro, párroco de Emaús, barrio Calazans en Medellín. Es una pena que los asesinos le quiten la vida a una persona sencilla, servicial, humilde y de buen sentido del humor. Es una pena que hoy urgidos de ministros para el servicio de la evangelización nos sigan quitando la vida; por esta razón, unámonos en oración profunda y agradezcámosle al Dios de la Vida por el servicio y la entrega de Jaime Ossa. Yo creo que este signo nos está diciendo mucho al Imey, a los jóvenes y a las comunidades, debemos por ello descifrar juntos el mensaje de Dios que nos está increpando y seguir fortaleciendo nuestra fe, nuestro compromiso y nuestras ganas de ser anunciadores de la vida y de la paz como misioneros, como discípulas y discípulos del Misionero Mayor.

La ponencia de hoy en el CAM3 COMLA 8 (Quito Ecuador) lleva por título: COMUNIDAD DISCÍPULA DE JESÚS y vista esta propuesta desde la muerte de nuestro estimado misionero, nos debe dejar muchos retos...

1... No somos nosotros quienes escogemos a Jesucristo, sino que es él quien nos escoge para seguir prolongando las relaciones de ternura, alegría de vivir, la compasión, la fe en el sencillo, el servicio desinteresado a las comunidades.
2... Jesucristo está viendo que es lo que está psando en este mundo, en el hoy... y nos llama por propia iniciativa para que seamos dispensadores generosos de vida y vida plena.
3... Y nuestra respuesta ha de ser pronta, generosa, dinámica y comprometida; mostrando con ello la autoridad y el poder de atracción de Jesucristo para hoy.

Amigas y amigos... Con el dolor que nos deja Jaime, podemos comprender que debemos dejar hoy más que nunca nuestras seguridades para seguir construyendo el Reino de la Vida y destruir el Reino que Asesina, Somete y Masacra. El abandonar hoy nuestras seguridades permite ver la radicalidad del seguimiento y la autoridad de Jesús que sigue llamando porque él quiere ver un Nuevo Reino Construído.

Como Misioneros Javerianos de Yarumal, hemos celebrado en memoria de Jaime y su familia hoy a las ocho de la noche en nuestra parroquia de San Carlos Borromeo en Quito Ecuador.

Jaime descanse en paz y ora por nuevas vocaciones misioneroas para nuestro Instituto de Misiones.

Con cariño.

Caliche mxy
Quito Ecuador
CAM3 COMLA 8




Grande fue el adiós al padre Jaime

CIENTOS DE PERSONAS de los barrios Calasanz y Ferrini despidieron al padre Jaime Ossa Toro, asesinado el martes y sepultado ayer.
Gustavo Ospina Zapata - Medellín | Publicado el 15 de agosto de 2008
Dos cosas hacían muy feliz al padre Jaime Ossa Toro: ayudar a los necesitados y comerse una bandeja de fríjoles con arepa y chicharrón. Y eso hizo toda su vida este sacerdote, que fue cruelmente asesinado el martes y sepultado ayer en el cementerio Jardines Montesacro, de Itagüí.

Si su muerte a puñal se había visto cruel, ayer se conoció un detalle que aumentó el repudio por el crimen: al padre Jaime, quien lo asesinó, también lo golpeó con una plancha en la cabeza y el pecho.

Fue un homicidio despiadado, muy horrendo para un ser humano que su vida la dedicó a servir y que se entregó sin reparos a su labor de misionero sin esperar recompensa, dicen quienes lo conocieron y amaron.

Fue tal su amor y afán por ayudar, que aprendió de un allegado odontólogo algunos secretos de la profesión para practicarlos a las comunidades abandonadas del África.

"Él, desde niño, se inclinó por el sacerdocio, cuando se ordenó estaba muy joven y decíamos que no iba a durar, pero vea, fue ejemplar", relató muy triste su prima Margarita Duque Ossa, quien reveló otro detalle que ni la familia supo: "cuando él estuvo en Angola -entre 1982 y 1994- un grupo lo secuestró, pero él no nos dijo nada".

Su hermana Marta apuntó que no esperaron una muerte violenta para él, "nos sorprendió, nunca imaginamos algo tan horrible, creo que quienes lo mataron eran conocidos a los que él les abrió la puerta para ayudarlos", dijo con sus ojos llorosos.

La homilía
Fueron cientos, tal vez más de mil, las personas que se congregaron ayer en el Seminario de Misiones Extranjeras de Yarumal, frente a la iglesia de Emaús, a escuchar la eucaristía de adiós.

La ceremonia fue presidida por el arzobispo de Medellín, monseñor Alberto Giraldo Jaramillo, quien no ahorró adjetivos para destacar el legado del padre.

"Fue la suya una vida vivida con sencillez e inmenso optimismo, fue un servidor sin condiciones a todo el que lo buscaba", dijo el prelado.

La misa, que se inició a las 10:00 de la mañana y culminó pasadas las 12:00, estuvo llena de cantos, mucha gente vestida de blanco y toda la comunidad, "como a él le habría gustado", dijo monseñor Giraldo. Hubo eso y más.

Sobraron alabanzas para el padre, que en sólo tres años dejó una huella profunda en Calasanz, Ferrini y los barrios vecinos.

"Nos deja una gran tristeza, para la iglesia y en lo personal, porque lo conocí, era un ser humano extraordinario", añadió monseñor Giraldo a EL COLOMBIANO.

Pero sin duda, la más grande huella la dejó el padre Jaime en el pueblo.

"Con el tiempo, la gente de Medellín se va a dar cuenta de la calidad de hombre que perdió... al que cometió el crimen deben capturarlo y aplicarle la ley", manifestó Rodrigo Hoyos, feligrés de Robledo.

Por el momento, hay un indiciado de 16 años como principal sospechoso.

Fueron muchos los testimonios que elogiaron la obra del padre Jaime, pero el más grande lo dio la más chiquita, Lina Marcela Rodríguez, una niña de sólo ocho años que relató en sus palabras lo que le queda como recuerdo:

"Él nos dio cuadernos, lapiceros y libros para estudiar a muchos niños...".

Hasta ahí llegaron sus palabras, porque Lina estalló en llanto. Y cuando un niño llora por la muerte de un adulto, es porque tiene de él recuerdos grandes. Eso me quedó claro del padre Jaime. Por eso su muerte a puñaladas y golpes, fue demasiado dolorosa. E inmerecida, teniendo en cuenta que ya tenía 70 años.

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Autoridades avanzan en investigación del crimen
Multitudinario adiós tuvo el padre Jaime



En medio de aplausos y acompañado por unas 2 mil personas que entonaron una canción de la cual se desprendía la estrofa “no te has muerto del todo ... aún escuchamos tu risa aquí”, ayer fue despedido el sacerdote Jaime Ossa Toro, de 70 años, quien el miércoles en la madrugada fue asesinado al interior de la casa cural de la Parroquia Emaús, en el barrio Calasanz, de Medellín.
Durante el sepelio del Padre Jaime adelantado en la capilla del seminario Misioneros de Yarumal, el mismo del que salió ordenado como sacerdote en 1962, no hubo una sola persona que dejara de reflejar en su rostro la tristeza y la indignación que produjo este crimen que fue calificado por muchos como “aberrante”.

Mientras que el arzobispo de Medellín, Alberto Giraldo Jaramillo, presidía la ceremonia eucarística en honor al religioso asesinado y sus fieles murmuraban entre ellos “lo buena persona que era el padre Jaime”, el coronel Edgar Henao Castaño, comandante de la Policía en la zona centro, afirmó que “está completamente desvirtuada” la hipótesis de robo como posible causa del asesinato del religioso “ya que de su residencia no se llevaron nada de valor”.

El coronel Henao recordó que “actualmente hay varios menores de edad que son pieza clave en la investigación, toda vez que fueron los últimos que vieron con vida al sacerdote”, pero aclaró que no están detenidos “sino bajo el cuidado de sus padres y con la custodia de las autoridades”.

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6 comentarios:

  1. Leyendo sobre la muerte de nuestro Amado párroco me encontré este interesante blog. Muchas gracias por la semblanza a tan entrañable ser humano, me seguiré pasando por aquí.

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  2. SOLO LE PIDO A DIOS QUE TENGA MISERICORDIA DE LAS PERSONAS QUE COMETIEROS ESTE HOMICIDIO POR QUE NO SOLO LE HICIERON DAÑO A LA FAMILIA SI NO A TODA LA COMUNIDAD EN GENERAL... YO TUVE EL HONOR DE CONOCERLO Y ME ATREVERIA A DECIR QUE JAMAS HABRA UNA PERSONA TAN ENTREGADA A DIOS QUE EL..Y PIDO POR FAVOR QUE NO CALUMNIEN QUE LO DEJEN DESCAR...

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  3. Padre Jaime Ossa Toro foi meu Director espiritual no Seminário Maior de Luanda- Angola. Foi um Padre muito amigo e conselheiro.
    Hoje agradeçeu ao Senhor pela sua vida e trabalho na Igreja em Angola.
    + Bispo Filipe Cupertino Ramos Teixeira, OFSJC

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  4. Aunque ya paso mucho tiempo desde que este ser maravilloso fue asesinado vilmente todavia sigue vivo en nuestros corazones y desde el cielo nos acompaña con sus risas y sus bendiciones ATT: Alejandro zapata

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  5. Aún no te he olvidado, tus detalles, tus gestos de amor, las veces que me regalabas ostias en la parroquia y esas castañuelas por que Sabías que me gustaba la música, esas semanas santas fueron las mejores de mi vida acompañándote como acólito, gracias infinitas a Dios por regalarnos un ser como tú espero que mis palabras lleguen al cielo y las escuches Te quiero mucho Jaime Ossa 💖

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Gracias por haber visitado mi blog, espero tus comentarios, reacciones y que continúes brindándome ideas y sugerencias para mejorarlo.
Gustavo Quiceno